WASHINGTON/MOSCÚ, 18 Sep. (Reuters/EP) -
Los gobiernos de Estados Unidos y Rusia se han mostrado dispuestos a hablar de sus discrepancias sobre la implicación externa en el conflicto sirio, un acercamiento que ya ha tenido como gesto la primera conversación en más de un año entre los dos ministros de Defensa.
El secretario de Defensa norteamericano, Ash Carter, y su homólogo ruso, Sergei Shoigu, han hablado durante 50 minutos después de que Washington haya reprochado a Moscú su apoyo militar al régimen de Bashar al Assad.
Según el Pentágono, han analizado como evitar contradicciones en los respectivos esfuerzos militares de los dos países y Carter ha insistido en la necesidad de concertar cualquier esfuerzo "con conversaciones diplomáticas que garanticen una transición política en Siria".
Carter ha subrayado también la necesidad de compatibilizar dicha transición con la "derrota" del grupo terrorista Estado Islámico, que tanto Moscú como Washington coinciden en señalar como amenaza para la pacificación en Siria.
Desde Londres, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, ha subrayado que su Gobierno está intentando "encontrar puntos en común" con el de Rusia. Kerry ha advertido del "peligro" de los "movimientos unilaterales" habida cuenta de la "urgencia" que requiere el conflicto.
El jefe de la diplomacia norteamericana ha insistido en que la "resolución política" de esta guerra no será posible con la "presencia a largo plazo" de Al Assad, a quien Moscú en cambio no considera un obstáculo insalvable para la paz.
Una portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Maria Zajarova, ha aclarado que su Ejecutivo "nunca ha rechazado el diálogo con Estados Unidos". "Estamos abiertos a él en todos los asuntos de interés mutuo", ha apuntado.