MADRID, 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha anunciado nuevas sanciones contra seis empresas iraníes vinculadas al programa armamentístico de la República Islámica, en respuesta a una serie de "provocaciones" entre las que Washington cuenta el lanzamiento de un cohete el jueves para poner satélites en órbita.
"Los vehículos de lanzamiento espacial usan tecnologías estrechamente relacionadas con las de un misil balístico intercontinental, por lo que representa una amenaza por parte de Irán", ha explicado el Tesoro en un comunicado. Por este motivo, ha confirmado castigos contra seis filiales del Grupo Industrial Shahid Hemmat, un órgano considerado "central" en esta carrera armamentística.
El secretario del Tesoro, Steven T. Mnuchin, ha subrayado que el Gobierno de Donald Trump seguirá respondiendo de forma contundente a este topo de actividades, "sea un lanzamiento espacial provocativo, el desarrollo de sistemas de misiles balísticos o el apoyo a los ataques de misiles de los huthis yemeníes contra Arabia Saudí".
"Estas sanciones se encuentra en la línea de la preocupación por parte de Washington sobre los ensayos balísticos por parte de Irán, así como otro tipo de provocaciones", ha aseverado Mnuchin.
La decisión de las autoridades estadounidenses han tenido lugar después de que el Senado de Estados Unidos aprobara con 98 votos a favor y dos en contra el texto legislativo para recrudecer las sanciones contra Rusia e imponer nuevas medidas contra Irán y Corea del Norte en relación con los programas nucleares y la vulneración de los Derechos Humanos.
Las sanciones del Tesoro implican la confiscación de los activos que las entidades señaladas puedan tener bajo soberanía norteamericana, al tiempo que limita cualquier tipo de colaboración con ellas.
VIOLACIÓN DE LAS RESOLUCIONES DE LA ONU
Las autoridades de Francia, Estados Unidos, Alemania y Reino Unido han señalado en un comunicado conjunto que el lanzamiento del cohete viola la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sobre el desarrollo de este tipo de actividades por parte de Irán.
El Departamento de Estado ha indicado que el lanzamiento del cohete supone una violación de las resoluciones aprobadas por el Consejo de Seguridad de la ONU así como del "espíritu" del acuerdo nuclear bajo el cual Teherán acordó reducir su programa nuclear a cambio del levantamiento parcial de las sanciones económicas.
La embajadora de Estados Unidos ante la organización, Nikki Haley, ha manifestado que la Administración Trump continuará respondiendo a las violaciones de Irán hasta que se cumplan las resoluciones de la ONU.
"La cuestión con Irán siempre acaba girando en torno a la desconfianza. Su apoyo al terrorismo nos dice que no podemos confiar en ellos. Irán no está cumpliendo con su obligación en relación con el programa nuclear y por ello no debemos confiar", ha afirmado la embajadora.
TEHERÁN ASEGURA CUMPLIR CON EL ACUERDO
El ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Javad Zarif, ha defendido este viernes que el misil lanzado el día anterior por la República Islámica respeta el acuerdo nuclear suscrito con las potencias globales en 2015 porque no persigue fines militares.
Zarif ha recordado que "cada palabra del acuerdo nuclear se negocio cuidadosamente" y ha sostenido que "Irán, al contrario que Estados Unidos, ha respetado de buena fe la letra y el espíritu del acuerdo nuclear". "La retórica y las acciones de Estados Unidos muestran mala fe", ha reprochado.
Las autoridades iraníes probaron con éxito el jueves el cohete 'Simorgh', destinado a poner satélites en órbita, desde el Centro Espacial Imán Jomeini, inaugurado oficialmente con este ensayo. Según datos oficiales, esta lanzadera puede transportar satélites de hasta 250 kilos a una distancia de 500 kilómetros sobre la superficie terrestre.