KABUL, 6 Dic. (Reuters/EP) -
Estados Unidos ha declarado este domingo que vigilará atentamente la confusión en torno al liderazgo del grupo insurgente talibán tras los rumores sobre la suerte que podría haber corrido su líder, Mulá Ajtar Mansur, tras el tiroteo en el que se vio envuelto esta semana, según ha informado el alto representante para Afganistán y Pakistán, Richard Olson, aunque ha reconocido que será difícil conocer con exactitud lo ocurrido.
"Nos hemos encontrado con afirmaciones contradictorias sobre el suceso y vamos a seguir con atención el desarrollo de la situación", ha afirmado Olson en una conferencia de prensa en Kabul.
"Ahora mismo somos bastante escépticos acerca de que el panorama se clarifique de aquí a corto plazo, pero, en todo caso, creemos que la estabilidad en Afganistán y el resto de la región pasan por poner fin a la violencia", ha añadido.
Las declaraciones de Olson, quién ha asumido el cargo recientemente, vienen tras la publicación de un mensaje de audio supuestamente atribuido a Mansur y que ha disparado los rumores de que el líder hubiera sido herido de gravedad durante el choque producido en Quetta esta semana.
"No me he querido pronunciar acerca de estos rumores pero me he visto obligado a tranquilizar a los Muyahidines (combatientes) y a los musulmanes ordinarios", ha señalado el líder en el comunicado que resume el mensaje de voz.
En él, acusa a los enemigos de los talibán de esparcir deliberadamente propaganda destinada a fomentar las divisiones dentro del grupo, admitiendo implícitamente la existencia de las mismas pero señalando que estas "diferencias verbales no significan que la situación vaya a desembocar en un conflicto armado".
"Tenemos Ulama (académicos religiosos) y líderes capaces de resolver e intervenir en estas materias y evitar que se alcance semejante estado", ha declarado Mansur.
Este mensaje, supuestamente emitido por el propio líder, niega que se encuentre herido o incluso muerto, calificando además estas afirmaciones como "rumores del enemigo". Por contra, su autoría no ha podido ser independientemente confirmada lo que aumenta el escepticismo acerca del estado de salud real Mansur.
Esto se debe a que los insurgentes talibán ya realizaron un movimiento similar tras la muerte de su anterior líder, Mulá Mohammad Omar, producida en 2013 pero que no fue confirmada por el grupo hasta julio de este año.
Mansur, número dos de la organización durante largo tiempo, fue oficialmente señalado como sucesor de Omar tras la tardía confirmación de la muerte de este. Aún así, su liderazgo ha sido rechazado por varias facciones internas del grupo, que acusan a Mansur de encubrir la muerte de Omar y asumir el poder sin contar con la autoridad necesaria para ello.