MADRID 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Etiopía han anunciado una prohibición de los vuelos en su espacio aéreo sobre la presa que construye en el río Nilo Azul, motivo de tensiones diplomáticas con Egipto y Sudán debido a su impacto sobre las aguas del Nilo.
El director general de la Autoridad de Aviación Civil de Etiopía, Wesenyeleh Hunegnaw, ha indicado en declaraciones al portal etíope de noticias Reporter que la decisión ha sido adoptada "tras consultas con los órganos de seguridad relevantes".
Así, ha destacado que el espacio aéreo en esta zona queda "cerrado a todos los vuelos", tanto de pasajeros como de carga, si bien las autoridades podrían emitir permisos en caso de que sean solicitados de antemano.
Por su parte, el comandante de la Fuerza Aérea, Yilma Merdasa, afirmó la semana pasada que las Fuerzas Armadas habían modernizado sus aviones de combate y eran capaces de proteger la presa ante cualquier ataque, sin pronunciarse sobre si cuentan con información sobre planes en este sentido.
Los gobiernos de Etiopía, Egipto y Sudán llevan varios años sumidos en un proceso de negociaciones en torno a la presa, contactos que han sufrido numerosos altibajos. Adís Abeba anunció en julio que había iniciado el llenado de la presa, a pesar de no contar con la autorización de El Cairo y Jartum.
Etiopía está financiando en solitario el proyecto y espera convertirse en el mayor generador y exportador de electricidad del continente. Sudán, por su parte, apoya la presa, ya que regulará los flujos y suministrará electricidad y regadío.
Las obras están siendo llevadas a cabo en la región de Benishangul-Gumaz y, una vez finalizadas, la presa será la más grande del continente con 1.800 metros de largo, 155 metros de alto y un volumen total de 10,4 millones de metros cúbicos, según recoge la empresa Salini Impreglio en su página web.