Rechaza cortar a Ankara ayudas a la preadhesión, que pedía el grupo de Le Pen
BRUSELAS, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
El pleno del Parlamento Europeo ha reclamado a "la suspensión temporal" de las negociaciones de adhesión con Turquía tras condenar "enérgicamente" las desproporcionadas medidas represivas" impulsadas por el Gobierno del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, tras el golpe de Estado fallido en julio en una resolución no vinculante aprobada por 479 votos a favor, 37 en contra y 107 abstenciones.
En el texto común, promovido por populares, socialistas, liberales, la izquierda europea y los verdes, los eurodiputados han reclamado "a la Comisión y a los Estados miembro que inicien el procedimiento para la suspensión temporal de las negociaciones de adhesión en curso con Turquía" aunque mantienen su "compromiso con mantener a Turquía vinculada a la Unión".
Eso sí, han vuelto a dejar claro a Ankara que "la reintroducción de la pena capital por el Gobierno de Turquía tendría que dar lugar a una suspensión formal del proceso de adhesión".
El pleno de la Eurocámara ha rechazado varias enmiendas del eurodiputado de la Liga Norte, el italiano Mario Borghezio, del grupo de las Naciones y Libertades que lidera Marine Le Pen, que exigía a los Gobiernos europeos que pusieran "fin" a las negociaciones de adhesión y a cortar "todos los pagos" que recibe Turquía "de inmediato" de ayudas a la preadhesión. Ankara recibirá 4.453 millones de euros entre 2014 a 2020 del Instrumento de Ayuda a la Preadhesión.
En su lugar, los eurodiputados han reclamado a la Comisión que "refleje los últimos acontecimientos" en el informe de evaluación de las ayudas a la preadhesión en 2017 y examine la posibilidad de "aumentar la ayuda a la sociedad civil turca".
VEN DESPROPORCIONADAS MEDIDAS REPRESIVAS
Los eurodiputados consideran que "las medidas represivas" adoptadas por el Gobierno turco en el marco del estado de excepción son "desproporcionadas y vulneran derechos y libertades fundamentales protegidos por la Constitución del país, los valores democráticos en que se fundamenta la Unión Europea".
Además, recuerdan que el apartado 5 del marco de negociación con Turquía prevé que la Comisión recomiende por iniciativa propia o a petición de un tercio de países la suspensión de las negociaciones "en caso de violación grave y persistente" de "los principios de libertad, democracia, Estado de Derecho y respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales en los que se funda la Unión".
En el texto, los parlamentarios señalan que, tras el fallido golpe de Estado en Turquía, ha detenido a 40.000 personas, otros 2.386 jueces y fiscales, una decena de diputados del pro kurdo HDP y 150 periodistas, "el mayor número" de periodistas detenidos en el mundo y critican que, en la "mayoría" de los casos, no se han presentado cargos en su contra y han manifestado "gran preocupación" por las condiciones de detención y las "severas" restricciones a la libertad de expresión y medios. Otros 129.000 empleados públicos han sido suspendidos o cesados.
Los eurodiputados admite la relación "estratégica" con Turquía pero no ven "voluntad política" por su parte de cooperar dado que se está alejando "aún más de la vía europea" y han insistido en que "como país candidato" debe mostrar "el máximo nivel" en el respeto del Estado de Derecho y las libertades fundamentales, incluido el derecho universal a un juicio justo y piden "asistencia judicial adicional" a Ankara de la Comisión, el Consejo de Europa y la Comisión de Venecia.
Con todo, los eurodiputados se comprometen a "revisar" su posición sobre la suspensión de las negociaciones "cuando se levanten las desproporcionadas medidas", es decir, una vez se levante el estado de excepción y se restablezca el Estado de Derecho y los derechos humanos "en todo el país".
La gran mayoría de eurodiputados exigió en el debate previo al voto22 de noviembre, congelar las negociaciones de adhesión con Turquía en respuesta a la represión contra la población tras el golpe frustrado de julio y la detención de miles de militares, jueces, fiscales, policías, académicos, periodistas y opositores.
La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, se mostró partidaria de continuar el diálogo con Turquía y avisó de que "si el proceso de negociación se termina" en su opinión "ambos" perderían. "Europa perdería un importante canal para el diálogo y capacidad de influencia en Turquía y Turquía perdería mucho", ha subrayado.
El comisario de Ampliación, Johannes Hahn, avisó de que Ankara se está alejando "de cualquier perspectiva creíble de adhesión a la UE" e insistió en que la reintroducción de la pena de muerte sería "una línea muy roja" tras recordar que su abolición en 2004 en Turquía fue "una condición previa" para abrir negociaciones de adhesión un año después.
No obstante, reconoció que "los Estados miembro no están preparados para tomar medidas drásticas" por ahora sino que "todavía se centran en la implicación" pero incidió en la necesidad de "seguir empujando" para que Turquía respete los principios democráticos y del Estado de Derecho. Sólo Austria ha pedido abiertamente suspender las negociaciones de adhesión con Turquía.