SKOPJE 11 Dic. (Reuters/EP) -
El ex primer ministro de Macedonia Nikola Gruevski ha dimitido este lunes como presidente del partido conservador CMRO-DPMNE, después de perder las elecciones de hace un año y tras los disturbios que tuvieron lugar en abril, cuando cientos de manifestantes irrumpieron en el Parlamento.
El CMRO-DPMNE ha señalado en un comunicado que la renuncia de Gruevski ha sido una decisión "moral" porque "es normal que la persona en la que todos confiaban asuma la responsabilidad por la derrota electoral". Los días 22 y 23 debatirán acerca del liderazgo de la formación después de esta "irrevocable" renuncia de Gruevski.
Gruevski, de 47 años, ha estado al frente de la formación desde 2003 y fue primer ministro de la antigua república yugoslava durante una década. En 2016, dimitió como primer ministro después de ser acusado de formar parte de una trama de escuchas en las que se interceptaron las conversaciones de más de 20.000 personas. Su dimisión llegó con vistas a la celebración de elecciones anticipadas.
Las elecciones parlamentarias del 11 en diciembre de 2016 concluyeron con una victoria justa del CMRO-DPMNE y estuvieron seguidas por un largo período de estancamiento en el Parlamento. Esta situación no concluyó hasta mayo, cuando el socialdemócrata Zoran Zaev formó una coalición con partidos de etnia albanesa, que representan un tercio de los 2 millones de habitantes que tiene Macedonia.
En abril, unos 200 manifestantes nacionalistas irrumpieron en el Parlamento de Macedonia después de que el gobernante partido Social Demócrata de Zaev y las formaciones defensoras de los ciudadanos de etnia albanesa se aliaran para elegir como presidente de la Cámara a un miembro de esta comunidad.
Entre los manifestantes se incluían miembros del CMRO-DPMNE. Este incidente se saldó con decenas de personas heridas, entre ellas el líder de los socialdemócratas.
El CMRO-DPMNE sufrió otro revés hace un mes cuando la Policía detuvo al ex ministro de Interior Mitko Cavkov, a varios de sus legisladores y a activistas por estar acusados de participar en los disturbios de abril.
Estas revueltas han supuesto la peor crisis política que ha sufrido el país desde 2001, cuando Occidente intervino para evitar el estallido de una guerra civil provocada por la insurgencia de etnia albanesa y prometió trabajar para apoyar la entrada de Macedonia tanto en la UE como en la OTAN.
Macedonia se independizó de la antigua Yugoslavia en 1991, pero ha avanzado poco en su camino hacia la UE y la OTAN por las disputas con el Gobierno de Grecia por su nombre.