Reclaman la liberación "inmediata" de Sebnem Korur, forense experta en lucha contra la tortura
MADRID, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de expertos de Naciones Unidas ha reclamado a Turquía el fin del uso de la legislación antiterrorista para "intimidar a defensores de los Derechos Humanos" y ha pedido la liberación "inmediata" de Sebnem Korur Fincanci, una forense experta en la lucha contra la tortura recientemente detenida.
Fincanci, que ayudó a desarrollar los estándares de referencia de la ONU en la investigación y documentación de casos de tortura, en el marco del Protocolo de Estambul, fue arrestada el 26 de octubre por "motivos no aclarados" después de que pidiera investigar el supuesto uso de armas químicas por parte del Ejército turco.
Los expertos de la ONU han resaltado que "el arresto de Fincanci parece ser parte de un patrón deliberado de aplicación de la legislación antiterrorista para desacreditar a defensores y organizaciones de Derechos Humanos e interrumpir su vital trabajo en materia médica y de Derechos Humanos".
"Hemos documentado muchos casos en los que la ley antiterrorista y otras cláusulas penales han sido usadas para acosar, arrestar, detener y condenar a actores de la sociedad civil en Turquía, incluida Fincanci, con argumentos espurios", han denunciado.
En este sentido, han lamentado que estos ataques busquen limitar el espacio civil y socavar el Estado de Derecho, al tiempo que han recordado que "la detención a la espera de investigaciones más allá del periodo de entrevista es una medida excepcional que debe contar con autorización judicial para mantener la legalidad y la proporcionalidad".
"Debe protegerse la capacidad de que los defensores de los Derechos Humanos y los trabajadores médicos puedan decir la verdad al poder. Su papel a la hora de exponer violaciones de los Derechos Humanos es uno de los pilares de las sociedades democráticas y, al igual que los derechos de expresión y asociación, están protegidos por el Derecho Humanitario", han argüido.
Por último, han recordado que Turquía es parte de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, al tiempo que han hecho hincapié en que han pedido a las autoridades turcas "medidas interinas inmediatas" para proteger "la integridad física y mental" de Fincanci.