MADRID, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las oficinas del líder de Hezb-e-Islami, Gulbudín Hekmatyar, en la capital de Afganistán, Kabul, han sido objetivo este viernes de un ataque con bomba, sin que por el momento haya informaciones sobre posibles víctimas o reclamación de la autoría del atentado.
Fuentes locales citadas por la cadena de televisión afgana de noticias 1TV han indicado que varios atacantes han activado explosivos en las instalaciones, situadas en la carretera de Dar al Amán, tras lo que se ha registrado un enfrentamiento con los guardaespaldas de Hekmatyar.
Según las informaciones recogidas por la agencia afgana de noticias Pajhwok, la explosión habría afectado a una mezquita situada en las oficinas de Hezb-e-Islami, si bien las autoridades no se han pronunciado y el partido tampoco ha emitido comunicado alguno para explicar la situación.
Hekmatyar, una de las figuras 'muyahidin' de más relevancia durante la guerra contra la Unión Soviética en los ochenta, fue uno de los señores de la guerra que se vieron involucrados en una cruenta guerra civil tras la salida de las tropas soviéticas del país, que se saldó con cientos de miles de muertos, la mayoría de ellos civiles.
Durante dicho conflicto, los milicianos de Hekmatyar fueron responsables de gran parte de la destrucción de Kabul debido a sus continuos bombardeos contra la capital, que provocaron miles de víctimas civiles, tras lo que fue primer ministro en dos etapas antes de que los talibán se hicieran con el control del país, lo que provocó su huida a Irán, de donde fue expulsado en 2002.
Posteriormente, emitió un comunicado para llamar a la 'yihad' contra Estados Unidos por su presencia en Afganistán, tras lo que fue declarado en 2003 como un "terrorista global" por Washington, si bien en 2016 alcanzó un acuerdo de paz con el entonces presidente afgano, Ashraf Ghani, que permitió su regreso al país, desde donde pidió a los talibán que entregaran las armas y se sumaran a la paz.