MADRID, 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
La red social Facebook ha informado una campaña fraudulenta de anuncios en los dos años previos a las últimas elecciones de Estados Unidos que habría tenido por objeto aumentar la división social en temas como los derechos de la comunidad LGTB y el racismo y ha detectado compras por valor de 50.000 dólares con origen claro en Rusia.
El jefe de seguridad de Facebook, Alex Stampos, ha explicado que a raíz de las "múltiples preguntas" surgidas por la supuesta injerencia rusa en los comicios estadounidenses, ha revisado "un amplio abanico de actividades" en la red social para determinar si hubo algún tipo de actividad sospechosa.
La empresa norteamericana ha concluido que entre junio de 2015 y mayo de 2017 se adquirieron unos 3.000 anuncios por valor de 100.000 dólares que estaban conectados con 470 cuentas falsas y con páginas que incumplían las políticas de inscripción de la empresa.
El análisis ha incidido específicamente la actividad que podría tener su origen en Rusia, teniendo en cuenta no sólo un criterio geográfico sino revisando también compras que pudieron haberse realizado desde direcciones IP de Estados Unidos pero utilizando el ruso como idioma.
Así, han encontrado unos 2.200 anuncios valorados en "aproximadamente 50.000 dólares" con trasfondo político y sobre los que se cierne de forma más clara la sombra rusa. "Hemos compartido nuestras conclusiones con las autoridades de Estados Unidos que investigan estas cuestiones y seguiremos colaborando con ellas cuando sea necesario", ha defendido Stamos.
El responsable de seguridad ha aclarado que "la amplia mayoría" de estos anuncios no incluían alusiones expresas a las elecciones presidenciales de 2016 o a alguno de los dos principales candidatos, sino que "parecían centrados en amplificar mensajes sociales y políticos de división a lo largo del espectro político".
La publicidad aludía a temas de debate social como los derechos de la comunidad LGTB, las polémicas relativas al racismo, la inmigración o la tenencia de armas de fuego.
Stamos ha prometido que Facebook tomará medidas para tratar de vigilar a quienes hacen un mal uso de la plataforma, promoviendo especialmente la "autenticidad" de las cuentas que se inscriben en ella. "Creemos en la protección de la integridad del discurso cívil y en requerir a los anunciantes que sigan tanto nuestras políticas como todas las leyes aplicables", ha esgrimido.
Los servicios de Inteligencia de Estados Unidos advirtieron en enero de que Rusia había interferido en el proceso para ayudar al candidato republicano --y a la postre vencedor--, Donald Trump, y ya entonces informaron del posible uso de propaganda en redes sociales para intentar moldear a la opinión pública.