MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
La familia de la periodista palestino-estadounidense Shirin abu Aklé, muerta en mayo tras recibir un disparo durante una operación de las fuerzas de Israel en la ciudad cisjordana de Yenín, ha aplaudido la decisión de Estados Unidos de investigar el incidente.
"Es un paso importante hacia la rendición de cuentas que acerca a la familia a lograr justicia por Shirin", ha dicho la familia en su comunicado, publicado por Lina abu Aklé, sobrina de la periodista, a través de su cuenta en la red social Twitter.
Así, la familia de la periodista se ha mostrado "esperanzada" por la apertura de la investigación y ha recordado que lleva pidiendo a Washington este paso "desde el principio". "Es lo que Estados Unidos debe hacer cuando un ciudadano estadounidense muere en el extranjero, especialmente cuando muere a manos de un Ejército extranjero, como es el caso de Shirin", ha señalado.
En este sentido, la familia de la periodista, ha mostrado su esperanza de que Estados Unidos "use todas sus herramientas de investigación a su disposición para lograr respuestas sobre la muerte de Shirin y hacer que los responsables de esta atrocidad rindan cuentas".
"Pedimos a todas las partes que cuenten con pruebas que respondan a las peticiones de investigación por parte del Departamento de Estado de Estados Unidos y que no se interpongan en el camino de la justicia", ha señalado, antes de mostrar la disposición de la familia de Abu Aklé para "apoyar la investigación".
"Esperamos que esta investigación por parte de Estados Unidos sea verdaderamente independiente, creíble y exhaustiva, que siga las pruebas hasta el final, tanto arriba como abajo en la cadena de mando", ha zanjado.
La carta ha sido publicada apenas unas horas después de que el ministro de Exteriores de Israel, Benjamin Gantz, desvelara que la investigación es un "error" y recalcara que las autoridades israelíes se niegan a cooperar con las pesquisas.
Gantz ha resaltado que el Ejército israelí ya llevó a cabo una "investigación profesional independiente" que llevó al Gobierno de Israel a admitir que era posible que Abu Aklé muriera a causa de un disparo efectuado por un soldado de Israel.
La periodista falleció por disparos el 11 de mayo durante una operación militar israelí en la Cisjordania ocupada, mientras trabajaba para el canal de televisión qatarí Al Yazira. La reportera llevaba un casco y un chaleco que la identificaba como periodista.
Por su parte, las conclusiones de la investigación independiente realizada por la Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos sobre la muerte de la periodista coinciden con la evaluación realizada por las autoridades palestinas y que apuntan a las fuerzas israelíes como responsables de la muerte de la reportera.
Las conclusiones de la investigación llevada a cabo por el organismo internacional desmontan además la narrativa de que existiera actividad de palestinos armados en las inmediaciones de la posición donde se encontraban los reporteros, como apuntó Israel en su momento.