SIDNEY, 18 Jul. (Reuters/EP) -
Un matrimonio australiano que perdió a su hijo y a su nuera en marzo por el hundimiento de un avión de Malaysia Airlines en el océano Índico ha vivido una nueva tragedia relacionada con la reciente caída de una aeronave de la misma compañía en el este de Ucrania.
Irene y George Burrows, residentes en la localidad de Biloela, en el estado australiano de Queensland, se quedaron en marzo sin su hijo, Rodney Burrows, y su mujer, Mary. Ambos viajaban en el vuelo MH370 que desapareció con más de 230 pasajeros a bordo.
Ahora, una de sus nietas, Maree Rizk, y su marido, Albert, figuran entre las víctimas del vuelo MH17 caído el jueves en el este de Ucrania por el supuesto disparo de un misil. A bordo del avión viajaban 298 personas, incluidos pasajeros y tripulación.
"Ha sido un día muy complicado", ha admitido un hijo de Irene, Greg Burrows, en declaraciones al periódico 'The Courier Mail".
La aerolínea no ha revelado las identidades de los pasajeros que viajaban a bordo del vuelo MH17, pero sí han confirmado que entre las víctimas figuran al menos 28 australianos. El primer ministro de este país, Tony Abott, ha reclamado una investigación para aclarar si, como parece, el avión fue derribado por un misil.