Las FARC reprochan a Santos su "amarga ingratitud" hacia Venezuela

BOGOTÁ, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -

El 'número dos' de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), 'Iván Márquez', ha reprochado al presidente colombiano, Juan Manuel Santos, su "amarga ingratitud" hacia Venezuela por la contribución del país vecino al proceso de paz, en medio del cruce de declaraciones entre Bogotá y Caracas por esta cuestión.

"Nos duele en el alma la amarga ingratitud del Gobierno Santos hacia Venezuela y su Gobierno, que tanto ha hecho por la paz de Colombia", ha escrito el jefe de negociador de la guerrilla en su cuenta oficial de la red social Twitter.

Las FARC se han sumado de este modo a la última crisis entre ambos países, que se desató el jueves por la noche cuando el presidente venezolano, Nicolás Maduro, calificó a Colombia de "Estado fallido" por su prolongada guerra y amenazó con revelar los "secretos" del proceso, aduciendo que Santos y las FARC habían firmado la paz gracias a él y a Hugo Chávez.

El vicepresidente colombiano, el general retirado Óscar Naranjo, ha defendido la "transparencia" del proceso y Santos, aunque sin mencionar de forma directa a Venezuela, ha subrayado que Colombia "afortunadamente tiene una democracia sólida donde se respetan los poderes públicos y las libertades".

En un tono más conciliador, el también guerrillero 'Carlos Antonio Lozada' ha subrayado que "no le presta ningún servicio la intervención de unos y otros en los asuntos internos" de cada país y ha llamado a manejar estas discrepancias "en el mejor plano de la diplomacia".

"Nosotros consideramos que el papel que ha jugado Venezuela en los procesos de paz es una demostración de cómo la cooperación y el entendimiento pueden contribuir a mejorar mucho la situación de la región", ha dicho el insurgente a la emisora colombiana La FM.

CRISIS EN VENEZUELA

Maduro hizo estas declaraciones sobre Colombia en el marco de la escalada de tensión con sus vecinos regionales por las críticas que éstos han hecho, incluido el Gobierno de Santos, a la gestión que el Palacio de Miraflores ha hecho de la crisis en Venezuela.

La tensión política en Venezuela alcanzó un nuevo pico el pasado marzo, cuando el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) despojó de sus poderes a la Asamblea Nacional --controlada por la oposición desde 2016-- y dejó sin inmunidad parlamentaria a los diputados.

El Gobierno de Maduro ordenó dar marcha atrás en sendas decisiones, algo que el TSJ cumplió, pero la oposición y la Organización de Estados Americanos (OEA) consideran que se ha producido una "ruptura del orden constitucional" que requiere elecciones anticipadas.

Desde entonces la Mesa de Unidad Democrática (MUD) no ha dejado de convocar manifestaciones multitudinarias que han acabado en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad. Hasta ahora, diez personas han muerto y más de mil han sido detenidas.