El CAIRO, 10 Oct. (Reuters/EP) -
Las conversaciones de unidad entre los negociadores palestinos de Al Fatá y el movimiento islamista Hamás han comenzado este martes en El Cairo "de forma optimista" y con "esperanza" ante esta nueva hoja de ruta hacia la reconciliación, según ha asegurado el delegado de Hamás, Izzat Reshiq.
"Nos hemos reunido en El Cairo llenos de esperanza por dibujar y establecer una hoja de ruta que nos lleve a una reconciliación nacional", ha afirmado Reshiq en su cuenta de Twitter.
Al Fatá perdió en 2007 el control de la Franja de Gaza, que quedó bajo el control de Hamás, considerado por muchas potencias occidentales como un grupo terrorista. Sin embargo, Hamás ha aceptado ceder poder en Gaza al Gobierno del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, --respaldado por Al Fatá-- gracias a un acuerdo mediado por Egipto.
Tras ese primer paso, El Cairo ha establecido esta semana tres días de conversaciones acerca de la aplicación de nuevas medidas hacia la unidad. Reshiq ha resaltado que la unidad y la reconciliación nacional entre todo el pueblo palestino es "una elección estratégica para continuar avanzando".
Azzam Ahmad, uno de los líderes del grupo Al Fatá, ha subrayado que las negociaciones también servirán para proteger el funcionamiento de los ministerios el Gobierno en Gaza. Una tercera cuestión a tratar será el destino de los 50.000 empleados que Hamás tiene contratados desde el año 2007.
El principal punto de debate en estas conversaciones será la seguridad, incluyendo el posible despliegue por parte de Al Fatá de unos 3.000 agentes de seguridad, que se unirían a las fuerzas policiales de Gaza a lo largo de este año. Esta decisión restauraría en gran medida la influencia del presidente palestino, Abbas, en Gaza y reduciría la presencia de Hamás.
La Autoridad Palestina espera las conversaciones que "esta sesión de diálogo nacional en El Cairo permita reconciliar y unir la tierra". El Gobierno "expresa su voluntad de asumir todas las responsabilidades en la Franja de Gaza tan pronto como las facciones afiancen un acuerdo".
La cesión de poderes administrativos fue un retroceso importante para Hamás, en parte motivado por los temores del grupo ante un posible aislamiento financiero y político después de que su principal donante, Qatar, se viera inmerso en una importante crisis diplomática con los aliados clave.
Por su parte, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha advertido a los palestinos acerca de las "reconciliaciones falsas", reiterando su demanda de eliminar la facción militar de Hamás. El partido-milicia, si embargo, ha sostenido que no discutirá acerca de este asunto.