BUENOS AIRES 8 Dic. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kichner, ha insistido este lunes en que el traspaso de poder al vencedor de las elecciones generales, Mauricio Macri, tendrá lugar en el Congreso, "como dice la Constitución", pocas horas después de denunciar a su sucesor de gritarle y maltratarla cuando hablaron por teléfono sobre el tema.
El presidente del Senado, Amado Boudou, ya puso a disposición de Macri el pasado fin de semana las invitaciones para la ceremonia en la que se celebrará el acto de toma de posesión de su cargo, que parece que tendrá lugar finalmente ante la Asamblea Legislativa en el edificio del Congreso Nacional el próximo jueves, 10 de diciembre, a las 12.00 de la mañana --hora local--, y no en la Casa Rosada, preferencia de Macri.
Este lunes, Fernández de Kirchner ha insistido en que la transición "va a ser como dice la Constitución" y, por lo tanto, sólo habrá jura en el Congreso, tal y como informa el diario argentino 'La Nación', que recoge las declaraciones realizadas por la mandataria a periodistas a las puertas de su departamento en el barrio porteño de Recoleta.
El acto, en el que se hará entrega de los atributos presidenciales, pondrá fin a 12 años de 'kirchnerismo' en Argentina y marcará un nuevo ciclo político en el país. Fernández de Kirchner insiste en que la ceremonia debe celebrarse en el Congreso --para recibir el apoyo de sus seguidores--, y no en la Casa Rosada, como prefería Macri.
Por su parte, el jefe de Gobierno porteño electo, Horacio Rodríguez Larreta, reiteró que si Fernández de Kirchner "no quiere ir" a la ceremonia en la Casa Rosada no se la puede "obligar", ratificando así la postura de Macri hacia el lugar en el que tendrá lugar la investidura.
En declaraciones a Radio Mitre recogidas por 'Infobae', Larreta aseguró que es "lógico e institucional" que Macri tome los atributos presidenciales de la presidenta saliente, pero indicó que "si ella no quiere ir, no se la puede obligar".
OTRAS POLÉMICAS
Además de esta, la ceremonia no ha estado exenta de polémicas. Tras la segunda vuelta de las elecciones que dieron la victoria a Macri, él y sus asesores han presentado reiteradas denuncias contra el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner por no brindarles acceso a las cuentas públicas, mientras el hasta ahora 'oficialismo' se ha quejado de las excesivas peticiones de la alianza opositora Cambiemos.
Asimismo, el orfebre Juan Carlos Pallarols, quien desde hace décadas se encarga de elaborar el bastón presidencial, denunció el pasado viernes presiones desde el Gobierno para que entregara el bastón a funcionarios del área de Protocolo, para poder controlar dónde entregarlo.
"Yo quiero que ellos se pongan de acuerdo. Yo soy artesano, yo soy platero, no soy mediador. No quiero tener que trabajar de eso", señaló Pallarols al canal de noticias TN, al que le relató que a una de sus asistentes la amenazaron con enviar a la Policía si no entregaba el bastón de inmediato. Horas después, el director de Protocolo pidió perdón al orfebre por estos hechos, unas disculpas que han sido aceptadas por el conocido orfebre.