MADRID, 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
Una semana después de la histórica visita a Cuba del presidente estadounidense, Barack Obama, el que fuera comandante de la Revolución cubana Fidel Castro ha publicado un extenso artículo sobre la misma dirigido al "hermano Obama" en el que le advierte de que la isla no necesita que Estados Unidos le "regale nada".
Bajo el título 'El hermano Obama', Fidel Castro se refiere en 'Granma' a la visita del mandatario estadounidense a Cuba, durante la que se reunió con el presidente, Raúl Castro, y con disidentes, además de ofrecer un discurso televisado a todos los cubanos, repasando algunos hechos históricos de la isla, incluido el desembarco de Playa Girón, conocido como Bahía de Cochinos por los estadounidenses.
Tras sostener que "nuestras vidas son una fracción histórica de segundo" y que "nadie es bueno o es malo por sí mismo", el histórico dirigente cubano asegura que ha sentido "el deber elemental de responder al discurso de Obama en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso", pronunciado el 22 de marzo.
"Mi modesta sugerencia es que reflexione y no trate ahora de elaborar teorías sobre la política cubana", recomienda Fidel a Obama, de quien reconoce su "origen humilde y su inteligencia natural evidentes".
En concreto, en su artículo, el expresidente recoge parte de las "almibaradas" declaraciones realizadas por el mandatario estadounidense en su discurso, en particular su llamamiento a olvidar el pasado y a mirar hacia el futuro, pese a los retos que aún quedan por delante.
"Se supone que cada uno de nosotros corría el riesgo de un infarto al escuchar estas palabras del presidente de Estados Unidos", ironiza Fidel, denunciando a renglón seguido el bloqueo del que es objeto Cuba desde hace casi seis décadas.
"Nadie se haga la ilusión de que el pueblo de este noble y abnegado país renunciará a la gloria y los derechos, y a la riqueza espiritual que ha ganado con el desarrollo de la educación, la ciencia y la cultura", sostiene el histórico líder revolucionario, advirtiendo de que la isla es capaz de "producir los alimentos y las riquezas materiales que necesitamos con el esfuerzo y la inteligencia de nuestro pueblo".
"No necesitamos que el imperio nos regale nada. Nuestros esfuerzos serán legales y pacíficos, porque es nuestro compromiso con la paz y la fraternidad de todos los seres humanos que vivimos en este planeta", remacha.