MANILA, 4 Sep. (DPA/EP) -
El Gobierno de Filipinas ha anunciado que a partir de la próxima semana eliminará la prohibición vigente que impide la entrada de viajeros de diez países, a pesar del repunte de casos de COVID-19 que atraviesa por la variante delta.
De esta forma, la restricción de entrada a los viajeros procedentes de India, Pakistán, Bangladesh, Sri Lanka, Nepal, Emiratos Árabes Unidos, Omán, Tailandia, Malasia e Indonesia se levantará el 6 de septiembre, ha detallado el portavoz presidencial, Harry Roque.
Roque ha indicado que "los viajeros internacionales procedentes de los países mencionados" deberán, no obstante, "cumplir con los protocolos de entrada, pruebas y cuarentenas correspondientes".
La restricción de entrada entró en vigor el pasado 29 de abril para los viajeros procedentes de India o los que había visitado recientemente el país surasiático. Posteriormente, con el avance de la variante delta, se añadieron más países a la lista de prohibición de entrada.
La medida ha sido aprobada por un grupo de trabajo nacional sobre el coronavirus, a pesar de que el país enfrenta un nuevo brote de casos debido a la alta virulencia de la nueva variante detectada por primera vez en India.
Las autoridades sanitarias filipinas han confirmado este sábado otros 20.741 nuevos casos de coronavirus, y ya son más de 2.06 millones las personas que se han contagiado en el país. El número de fallecidos, por otro lado, ha sido de 189 en las últimas 24 horas, para un total de 34.062.
La subsecretaría de Salud, María Rosario Vergerie, ha detallado que, según las predicciones, los casos seguirán aumentando hasta finales de mes, incluso aunque se impusiera un confinamiento estricto.
"Sólo esperamos que los casos graves y críticos no aumenten", ha agregado Vergerie. "Estamos estudiando nuevas estrategias, analizando lo que funciona y lo que no funciona para tener una mejor respuesta en las próximas semanas".