MADRID 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Filipinas retirará a partir del 1 de agosto la prohibición de entrada a ciudadano extranjeros y permitirá que accedan a su territorio aunque mantendrá una serie de restricciones para este colectivo, según ha informado el portavoz de la Presidencia, Harry Roque.
El grupo operativo intergubernamental encargado de controlar las enfermedades infecciosas aprobó el jueves la nueva política de entrada de ciudadanos extranjeros. De acuerdo con esta nueva regulación, la entrada de ciudadanos foráneos volverá a estar permitida desde el 1 de agosto aunque con limitaciones.
Se permitirá la entrada de los ciudadanos extranjeros que ya tuvieran visado antes de la prohibición o de que aquellos que tengan visado de larga estancia. Estarán por tanto autorizados a entrar en Filipinas los ciudadanos extranjeros amparos por la sección 13 de la Ley 613 de la Commonwealth, la Ley de 7919 de la República de Filipinas y la Orden Ejecutiva 324.
Estas normas incluyen a los extranjeros con residencia permanente, a las esposas y esposos casados con filipinos y a los hijos de parejas con un progenitor filipino y que tengan menos de 21 años, entre otros supuestos. Las autoridades no concederán nuevos visados.
Las personas que puedan acogerse al nuevo régimen de entrada tendrán que pagar por su estancia en cuarentena en una instalaciones específicas y por un test de detección de coronavirus, según informa el diario 'The Philippine Star'.
La pandemia de coronavirus ha dejado en Filipinas más de 61.000 casos, incluidos 2.498 positivos detectados en las últimas 24 horas, y 1.643 víctimas mortales. Del total de casos, más de 38.000 corresponden a casos activos, según los datos del Ministerio de Sanidad.