WASHINGTON 15 Sep. (Reuters/EP) -
El ministro de Asuntos Exteriores filipino, Perfecto Yasay, ha manifestado este jueves que, a pesar de que Filipinas sea un fuerte aliado de Estados Unidos, Washington no debería dar lecciones sobre Derechos Humanos a Manila ni tratarlo como a un "hermano pequeño marrón", expresión utilizada durante la época colonial para referirse a los nativos filipinos.
Yasay indicó en su visita a Estados Unidos que algunos de los polémicos comentarios realizados durante las últimas semanas por el presidente filipino, Rodrigo Duterte, han sido mal interpretados. El mandatario ha explicado que la decisión del presidente de retirar las Fuerzas Armadas estadounidenses del sur de Filipinas supone tan sólo una medida temporal para proteger a los militares mientras el Ejército filipino lucha contra los milicianos del grupo terrorista Abu Sayyaf.
Filipinas y Estados Unidos han mostrado en diversas ocasiones su preocupación por la intención del Gobierno chino de reclamar varios territorios del mar de China Meridional. Washington y Manila han acordado este año llevar a cabo patrullas marítimas conjuntas en esa zona.
Yasay ha insistido en que la relación entre Estados Unidos y Filipinas debe estar basada en el respeto mutuo. "Pido a mis amigos estadounidenses y a sus líderes que observen nuestras aspiraciones. Tenemos que continuar desarrollándonos y creciendo para convertirnos en el gran hermano de vuestra propia gente", ha señalado.
"Lo que no pueden hacer es acudir a Filipinas y decir que nos van a ayudar sólo si cumplimos con una serie de requisitos", ha zanjado el ministro, que ha indicado que Manila "no se encuentra en este momento" preparado para tratar de forma bilateral las disputas territoriales con China.