MADRID, 26 May. (EUROPA PRESS) -
Las labores de inspección de los tanques de almacenamiento de agua tratada procedente de la central nuclear de Fukushima realizadas durante la última semana por parte de un grupo de expertos surcoreanos han llegado este viernes a su fin.
El equipo, formado por 21 expertos y encabezado por el presidente de la Comisión de Seguridad y Protección Nuclear, Yoo Guk Hee, ha tratado de despejar las dudas sobre la seguridad del agua durante una visita de seis días.
Ahora, todos ellos han regresado a Corea del Sur, donde analizarán si las toneladas de agua tratada son suficientemente seguras para ser vertidas en el mar este verano, tal y como prevé el Gobierno japonés.
"Uno de los principales asuntos que tenemos que abordar es si el proceso de verter este agua será llevado a cabo de forma apropiada en una situación que realmente es anormal", ha aseverado Yoo en declaraciones a la agencia de noticias Yonhap.
El viaje ha incluido una inspección de dos días a las instalaciones de Fukushima, precisamente para examinar su sistema de purificación de agua, conocido como ALPS, así como los tanques diseñados para almacenar sustancias radiactivas.
En este sentido, Yoo ha señalado que han podido examinar con detalle estos asuntos y que han pedido, además, datos adicionales. "Planeamos explicar los contenidos de esta inspección tan pronto como sea posible", ha puntualizado.
Sin embargo, la visita a suscitado críticas por el papel limitado de los expertos, que han sido acusados de participar en una "mera formalidad" sin la posibilidad de verificar suficientemente la seguridad el proceso en cuestión.
Esta era la primera inspección independiente de este tipo realizada por parte de expertos surcoreanos y se ha producido tras el encuentro entre el presidente, Yoon Suk Yeol, y el primer ministro japonés, Fumio Kishida, a principios de este mes.