¿Cómo financiamos los europeos la ayuda que salva vidas?

Los impuestos que pagamos sirven para asistir a millones de personas en todo el mundo

MADRID, 9 Mar. (Por Victoria Peel Yates, Humanitarian Funding Coordinator de Oxfam Intermón) -

51,2 millones. Esta cifra, tan difícil de imaginar, es el número de personas que ha tenido que huir de sus hogares en el mundo. Si todas ellas formaran parte de un sólo país, sería uno de los más poblados (en concreto, se situaría en la posición 26), superando el número de personas desplazadas y refugiadas ocasionadas por la Segunda Guerra Mundial, que se estima en unos 50 millones.

En este dramático contexto, los conflictos armados se multiplican. Siria, Sudán del Sur y República Centroafricana son algunos de los escenarios de los desplazamientos más masivos, tanto dentro como fuera de sus fronteras. Allí, estas personas huyen hasta encontrar un sitio seguro, fuera de la zona del conflicto, y donde, si tienen suerte, encontrarán ayuda para cubrir sus necesidades básicas: agua, comida y refugio.

Pero, ¿quién les proporciona esta ayuda? Buena parte la estamos financiando nosotros, la ciudadanía europea. A través de nuestros impuestos, contribuimos con más de un billón de euros gestionados por ECHO en 2013, cifra que le sitúa como el segundo donante humanitario más importante del mundo, después de Estados Unidos.

En total, la Unión Europea, junto con sus estados miembros, alcanza a ser el donante más importante en el ámbito de la ayuda humanitaria hoy en día; proporciona aproximadamente el 50 por ciento de la ayuda humanitaria global a más de 120 millones de personas en 90 países del mundo.

¿CÓMO LLEGAN ESTOS FONDOS A LAS PERSONAS REFUGIADAS?

La Oficina de Ayuda Humanitaria de la Comisión Europa (ECHO, por sus siglas en inglés), es el departamento de la Unión Europea que gestiona los impuestos destinados a financiar respuestas humanitarias, a través de las ONG como Oxfam Intermón, que aseguran que la solidaridad europea llegue a salvar las vidas de millones de personas desplazadas por conflictos armados, en 33 países del mundo.

ECHO cuenta con aproximadamente 200 socios; la mayoría son ONG, pero también canaliza fondos a través de las agencias de Naciones Unidas. Son estos socios quienes implementan las acciones humanitarias, salvando vidas y aliviando el sufrimiento de personas afectadas por las crisis en todas partes del mundo.

La oficina europea es el único donante que tiene presencia en muchos de los países donde trabajan sus socios: 44 oficinas, en 39 países, un hecho que le posiciona como "donante-actor". Los expertos y expertas de ECHO trabajan estrechamente con sus socios para asegurar la calidad de los programas y la buena gestión de los fondos europeos.

Muchos de los que vivimos en países de la Unión Europea no imaginamos que con nuestro dinero estamos proporcionando ayuda vital a estas personas. Pero lo cierto es que el trabajo conjunto entre ECHO y las ONG contribuye a salvar vidas y aliviar el sufrimiento. Sin la solidaridad europea no sería posible llevar a cabo estas intervenciones vitales.

Tenemos el poder para posibilitar el cambio de esta dramática situación para millones de personas a través de los impuestos que pagamos. Así formamos todos parte del sistema de ayuda humanitario, y juntos tenemos el poder de salvar vidas.