El fiscal general de EEUU testificará el martes ante la comisión del Senado que investiga las relaciones con Rusia

WASHINGTON 11 Jun. (Reuters/EP) -

El fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, ha anunciado este sábado que testificará el martes ante la Comisión de Inteligencia del Senado estadounidense, que analiza las supuestas relaciones entre el equipo de campaña del presidente estadounidense, Donald Trump, y el Gobierno de Rusia.

Sessions ha señalado que lo "más apropiado" es abordar ante la comisión los asuntos relacionados con la comparecencia de el exdirector del FBI James Comey, que reveló el jueves que Trump le pidió que frenara la investigación contra el exasesor de Seguridad Nacional Michael Flynn por su presunta relación con Rusia.

"Es importante que tenga la oportunidad de referirme a estos asuntos en un lugar adecuado", ha aseverado el fiscal en una carta dirigida al senador republicano Richard Shelby.

Comey compareció ante la comisión para determinar si Trump incurrió en un delito de obstrucción a la justicia por sus presiones sobre el FBI, pero rehusó pronunciarse al considerar que es una conclusión que corresponde únicamente a la Fiscalía.

No obstante, Comey reveló que Trump le pidió que frenara las investigaciones contra Flynn, que se vio obligado a dimitir por sus contactos con oficiales rusos.

La Comisión de Inteligencia del Senado está investigando si se produjo algún tipo de intervención por parte de Rusia en el marco de las elecciones presidenciales celebradas en 2016.

El ex director del FBI, que fue cesado de forma fulminante por Trump, ha advertido de que la Casa Blanca intenta "difamarle" para ocultar la presión que ejerció sobre él para que desviara la atención de la supuesta influencia rusa en la política estadounidense.

La comparecencia de Comey, que aseguró que Trump le presionó, ha levantado la polémica sobre la posibilidad de que exista algún tipo de relación entre Sessions y altos cargos del Gobierno de Rusia.

La comisión tendrá que discernir si el fiscal general se reunió en secreto con el embajador ruso en Estados Unidos, Sergei Kislyak, durante la campaña o después de que Trump jurara el cargo.