MADRID, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía de Bolivia ha declarado nuevas imputaciones contra el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, detenido y encarcelado por su papel en las violentas manifestaciones y protestas en 2019 que acabaron con la salida del país del entonces presidente Evo Morales, y que implicarían una extensión de su estado de prisión preventiva durante otros cuatro meses.
Hasta ahora Camacho estaba siendo juzgado por terrorismo en grado de autoría en el marco del caso 'golpe de Estado I', que aborda los hechos acontecidos en noviembre de 2019, cuando el presidente Morales se vio obligado a abandonar el país por presiones militares y en medio de sospechas por la transparencia de las elecciones.
La Fiscalía de Bolivia amplió en enero la investigación contra Camacho, arrestado desde finales de diciembre, y le ha acusado también de los delitos de cohecho activo y seducción de tropas.
Ahora, Camacho ha sido imputado en las últimas horas por una amplia variedad de delitos, desde financiación de actos terroristas hasta el uso indebido de bienes y servicios públicos como gobernador de la región más rica de Bolivia e históricamente contraria a los gobiernos del Movimiento al Socialismo fundado por Morales y al que pertenece el actual presidente, Luis Arce.
Su abogado, Martín Camacho, ha declarado que esta imputación, presentada ante el Juzgado 1 de Instrucción Anticorrupción de La Paz este pasado viernes, implica que los fiscales "están solicitando cuatro meses más de detención por estos supuestos nuevos delitos dentro del mismo caso que ya está detenido", confirmó a Infobae.
El próximo 30 de abril se cumplirán los cuatro meses de prisión preventiva que habían sido decididos por la justicia el pasado 30 de diciembre. Y subrayó: "Lo que busca el gobierno obviamente es continuar con esta injusta detención agregándole cuatro meses más".