MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía General de Colombia ha acusado de homicidio agravado a dos oficiales y suboficial de la Policía por la muerte de seis jóvenes en la ciudad de Cali durante las últimas protestas que se produjeron entre abril y junio de este año contra las reformas económicas del presidente, Iván Duque.
Así lo ha dado a conocer Elmer Montaña, abogado de las familias de las víctimas a través de su cuenta de Twitter, en donde ha informado de la identidad de los acusados, el coronel Edgar Vega Gómez, el comandante de los grupos especiales Néstor Mantilla y el patrullero Wilson Orlando Esparragosa.
Estaba previsto que los tres agentes acudieran este miércoles a declarar, aunque finalmente la audiencia, a petición de la defensa, ha sido aplazada hasta el próximo 9 de septiembre. Los hechos ocurrieron durante los disturbios en los que derivaron las pasadas manifestaciones contra el Gobierno de Duque, que se prolongaron desde el 28 de abril al 15 de junio.
Las víctimas, José Ambuila, Kevin Antonio Agudelo, Harold Antonio Rodríguez, Heinar Alexander Lasso, Edwin Villa y Miguel Ángel Pinto, murieron, señala la acusación, como consecuencia de la violencia policial en los barrios de Siloé, Calipso y Puerto Rellena, en Cali.
"Como abogado de las víctimas reconozco y valoro el trabajo que viene adelantando la Fiscalía de Colombia con el fin de no dejar impunes los homicidios de las personas que fueron asesinadas por miembros de la Policía", ha escrito.
Montaña ha pedido como medidas cautelares no solo apartar de sus funciones a los agentes --con el fin de garantizar "transparencia en la investigación" y evitar que los acusados utilicen su cargo para entorpecer la misma--, sino también su entrada en prisión preventiva.
"En mi calidad de apoderado de las víctimas, solicito, respetuosamente a la Policía de Colombia apartar de sus cargos a los policías citados a imputación, con el fin de garantizar transparencia en la investigación y que los cargos no sean utilizados para entorpecer la misma", ha requerido.
Durante aquellas protestas, en las que participaron amplias capas de la sociedad civil, sindical, estudiantil y la oposición política, el papel de las fuerzas de seguridad fue ampliamente criticado tanto dentro como fuera de Colombia por la violencia desmedida ejercida contra los manifestantes, motivando incluso una visita de una delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).