MADRID, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía de El Salvador ha acusado al ex alcalde de San Salvador Ernesto Muyshondt, detenido el sábado por apropiación indebida, de evasión fiscal, presuntamente cometida en una empresa de la que él es representante legal.
Según el dictamen del Ministerio Público, recogido por el diario 'La Prensa Gráfica', Muyshondt, representante legal junto al cónsul en Dinamarca Francisco García-Prieto de la empresa Agropecuaria Montegrande, no pagó el impuesto sobre la renta a la Hacienda salvadoreña en el año 2018.
La cantidad adeudada asciende hasta los 21.000 dólares (algo más de 17.200 euros) y, según la Fiscalía, podría aumentar debido a la multa y los intereses generados en ese período. El Ministerio Público ha incidido en que la acusación contra el también asesor de la Organización de Estados Americanos (OEA) no está relacionada con la época en la que estuvo al frente del Gobierno de la capital.
Por su parte, Muyshondt ha asegurado a la salida del juzgado que la cantidad supuestamente no abonada ya está "cancelada" y ha reiterado que las acusaciones en su contra son una "persecución política". Mientras, su abogado, Arturo Muyshondt, ha afeado que el nuevo delito del que se le acusa no implicaba la necesidad de que haya sido trasladado al tribunal como si fuera un "capo de la droga".
Según su defensor, que además es su tío, el exalcalde se había comprometido a pagar la deuda al Ministerio de Hacienda salvadoreño, pero no ha podido hacerlo por los problemas económicos a los que se enfrenta la empresa.
"La forma en la que lo llevan, lo traen, para esto no se necesita prisión, es decir que es una cosa que se hubiese manejado de otra forma por la cantidad", ha considerado, según recoge el diario 'El Salvador'. "Si alguien tiene un fraude fiscal de diez millones de dólares (...) pero por esa cantidad no valía la pena hacer el 'show' que han hecho, la exposición de la persona", ha insistido.
Muyshondt fue detenido por la Policía el sábado, acusado de apropiación indebida. Además, su aprehensión tuvo lugar después de que un juzgado salvadoreño decretara prisión domiciliaria contra el exregidor por fraude electoral y asociación ilícita "tras haber negociado con pandillas a cambio de votos".
La detención del exalcalde tuvo lugar, además, un día después de que la OEA anunciara que había aceptado sumarse como asesor a la Secretaría General de la organización. Tras ello, el fiscal general salvadoreño, Rodolfo Delgado, anunció la ruptura de la Fiscalía con la Comisión Internacional contra la Impunidad en El Salvador (CICIES), dependiente de la OEA. Delgado justificó la ruptura del acuerdo aludiendo al nombramiento de Muyshondt.
La OEA, por su parte, ha lamentado en fin de la cooperación con la comisión anticorrupción y puntualizó que Muyshondt "no fue contratado", sino que "solamente se le hizo un ofrecimiento en su momento por un contrato honorario", aunque "nunca se firmó".