MADRID, 15 Feb. (EDIZIONES) -
El aumento del nivel del mar a consecuencia del cambio climático está llevando a ciudades costeras de todo el mundo ubicadas a desarrollar soluciones muy variadas para tratar de paliar los dramáticos efectos que podrán tener en un futuro inundaciones o tsunamis.
La última, y sorprende, propuesta está firmada por la alianza entre el despacho de arquitectos Kohn Pederson Fox Associates y la compañía de ingenieros Leslie E Robertson Associates y se ha presentado como un proyecto para Tokio ante el Consejo de rascacielos y Hábitat Urbano (CTBUH).
En lugar de construir barreras para el mar o levantar la costa mediante la elevación artificial del litoral, han propuesto construir un nueva ciudad frente a la actual urbe erigida sobre islas artificiales ganadas al mar dentro de la bahía de Tokio.
El 'nuevo Tokio' se distribuiría en islas exagonales que servirían de barrera ante una posible ola gigante y se aprovecharán además para construir sobre ellas una nueva urbe que incluiría un rascacielos de casi 1,6 kilómetros de altitud, con capacidad de albergar a miles de residentes.
El proyecto es sólo eso, un proyecto, e incluye elementos futuristas que apenas se han desarrollado, como un sistema de transporte entre las islas a través de tubos: el Hyperloop, basado en el prototipo presentado por el millonario estadounidense y consejero delegado de la firma de automóviles eléctricos Tesla, Elon Musk.
Para resolver el problema del suministro de agua en este inmenso rascacielos, el proyecto propone un sistema de reaprovechamiento del agua de la lluvia integrado en el propio edificio.
Según defienden los autores del proyecto, las islas artificiales, de entre 150 y 1.500 metros de ancho, se distribuirían para contrarrestar la fuerza de posibles olas gigantes, respetando las vías marítimas que operan dentro de la bahía.