La ministra de Exteriores de Francia, Catherine Colonna, durante una visita a la capital de Ucrania, Kiev - -/Ukrinform/dpa
MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Exteriores de Francia, Catherine Colonna, ha acusado este martes a Rusia de cometer "crímenes de guerra" en Ucrania y ha afirmado que el presidente ruso, Vladimir Putin, tiene entre sus tácticas los "ataques indiscriminados" contra Ucrania.
"Rusia ha cometido crímenes de guerra en Ucrania. Hay que llamar a las cosas por su nombre", ha dicho en una entrevista concedida a la emisora France Inter, en la que ha agregado que "la Rusia de Putin ha dado un paso más en los ataques que lleva a cabo desde el principio, en una táctica que busca llevar a cabo bombardeos de forma indiscriminada".
"Ayer se vieron de nuevo ataques deliberados contra objetivos civiles en todo el territorio internacional. Es una violación del Derecho Internacional" ha denunciado, en referencia a los ataques ejecutados el lunes por el Ejército ruso contra varias ciudades, incluida Kiev, que han dejado alrededor de 20 muertos y más de un centenar de heridos.
Asimismo, Colonna ha destacado que el apoyo de Francia a Ucrania "es algo probado" y ha recordado que París ha entregado "mil toneladas de ayuda". "La ayuda es militar y también hay sanciones", ha resaltado, antes de indicar que se han dado a Kiev cañones César, "célebres por su eficacia", misiles, municiones y vehículos blindados.
Por otra parte, ha defendido la "importancia" de "mantener un canal de comunicación" con Putin. "Hace falta, lo contrario sería irresponsable", ha argüido, al tiempo que ha incidido en que esto "ha producido efectos, si bien no los esperados". "Sirvió recientemente para ayudar al Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) a visitar la central nuclear de Zaporiyia", ha zanjado.
Rusia intensificó el lunes sus ataques sobre varias ciudades, entre ellas Kiev, pero también Leópolis, Zaporiyia, o Járkov, como respuesta a lo que el presidente ruso calificó como "atentado terrorista" en relación con la destrucción el sábado del puente de Kerch, que conecta Rusia con la península de Crimea.