MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los presidentes de Francia y Argelia, Emmanuel Macron y Abdelmayid Tebune, han dado por cerrada la crisis diplomática abierta en torno a la opositora argelina Amira Buraui con el anuncio del pronto retorno a París del embajador argelino, Said Musi, llamado a consultas el mes pasado.
Argelia tomó esta decisión tras conocer que Buraui, condenada a dos años de cárcel en mayo de 2021 por diversos cargos "contra la unidad nacional del país", fue "exfiltrada de manera clandestina" a Francia, según anunció en su momento el Ministerio de Exteriores argelino.
En el comunicado de este viernes, el Elíseo confirmó que Buraui --a la que se limita a identificar como "una ciudadana franco-argelina"-- llegó a Francia desde Túnez "con el apoyo de los servicios consulares franceses" el 6 de febrero, dos días antes de la llamada a consultas del embajador.
En la nota, la Presidencia francesa explica que la conversación telefónica mantenida por Macron y Tebune ambos líderes han acordado "reforzar los canales de comunicación" para evitar "que se repitan lamentables malentendidos", como describe el caso de la opositora.
Así las cosas, el presidente Tebune informó a Macron del "regreso a Francia del embajador de Argelia en los próximos días", según el comunicado.
Por lo demás, los dos presidentes hicieron balance de la relación bilateral y de la aplicación de la Declaración de Argel suscrita durante la visita del presidente argelino a Francia en agosto del año pasado, un documento que certificó una "nueva dinámica irreversible" en las relaciones entre ambos países, 60 años después de la independencia argelina del colonialismo francés.
Por último, los dos presidentes "también abordaron temas de estabilidad regional, en particular la lucha contra el terrorismo en el Sahel", concluye el comunicado.