MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Frente Polisario ha asegurado este viernes que ha disparado contra cuatro bases y dos puntos de vigilancia marroquíes situados en el muro de separación construido en el desierto después del ataque de las fuerzas de Marruecos en el paso fronterizo de El Guerguerat, algo que entienden como una violación del acuerdo de alto el fuego firmado por ambas partes y, por tanto, un acto "cobarde" ante el que "declara la guerra".
"Los valerosos combatientes del Ejercito de Liberación Nacional han dado duros golpes al ejercito marroquí, atrincherado en el muro de ocupación que divide el territorio nacional", ha informado el Polisario en un comunicado este viernes.
En este sentido, han detallado que la ofensiva "ha bombardeado" la base marroquí número 23 --Mahbes--, número 4 --Hauza--, número 17 --Auserd--, número 17 y 18, así como el puesto de vigilancia número 71 y el 172.
El informe de lo que han considerado "el primer parte de guerra en el Sáhara Occidental" también ha subrayado que "en los ataques saharauis se han reportado bajas mortales en las filas del enemigo y considerables pérdidas materiales", algo sobre lo que Marruecos no se ha pronunciado.
El Polisario también ha considerado que "con el ataque a civiles saharauis en El Garguerat, Marruecos ha socavado seriamente no sólo el alto el fuego y los acuerdos militares relacionados, sino también cualquier oportunidad para una solución pacífica y duradera al problema de la descolonización en el Sáhara Occidental".
LA DISPUTA EN EL GUERGUERAT
Las Fuerzas Armadas de Marruecos se han desplegado este viernes en la zona de El Guerguerat, fronteriza con Mauritania, para garantizar la libre circulación tras semanas de bloqueo por parte de activistas saharauis y de "provocaciones" atribuidas desde Rabat al Frente Polisario.
El Ejército marroquí ha destacado que la acción "no es ofensiva ni tiene intención bélica", así como ha asegurado que ha evitado "todo contacto con personas civiles y recurrir a las armas salvo en caso de legítima defensa".
En un comunicado emitido por el Ministerio de Defensa de Marruecos y recogido por la agencia MAP, ha señalado que "esta operación, destinada a poner fin definitivamente a la inaceptable conducta del Polisario, viene después de agotar todas las posibilidades de una solución diplomática a través de los buenos oficios de las Naciones Unidas".
No obstante, el Polisario lo ha interpretado como una violación del alto el fuego y ha dado por declarada la guerra, aunque Marruecos ha asegurado estar "firmemente comprometido con el mantenimiento del alto el fuego".
El Frente Polisario, que controla la autoproclamada República Árabe Saharaui Democrática (RASD), ya denunció el lunes el envío de fuerzas de Marruecos a la zona del paso de El Guerguerat, anticipando el inicio de "una nueva guerra total en la región", y este viernes ha alertado de que la nueva operación representa una violación "deliberada" del alto el fuego.
Respecto a la acción de este viernes, ha denunciado que "un grupo de matones marroquíes vestidos de civiles" ha atacado a un grupo que protestaba de forma pacífica y que las tropas marroquíes han traspasado el muro que separa a ambas partes "en un cobarde intento por cercar la región".
GUERGUERAT, "COMPLETAMENTE ASEGURADO" SEGÚN RABAT
Por su parte, Rabat ha comunicado que el paso fronterizo de El Guerguerat "está ahora completamente asegurado gracias al establecimiento de un cordón de seguridad por parte de las Fuerzas Armadas Reales (FAR)", según informa la agencia de noticias MAP.
Marruecos había asegurado previamente que tras el bloqueo efectuado por "unas sesenta personas" y, dada la limitación que ha supuesto para la circulación a través de este paso --considerado "ilegal" por el Polisario--, se había establecido un "cordón de seguridad" desde este jueves por la noche.
Este "cordón de seguridad", garantiza "el flujo de bienes y personas a través del cruce entre los dos puestos fronterizos".
En el informe del Ministerio de Exteriores sobre el incidente se remarca que, durante la operación, el Polisario "abrió fuego contra las FAR, que devolvieron el fuego y obligaron a los milicianos a huir, sin registrar ningún daño humano".
La huida, detalla la cartera de Exteriores, se produjo después de que el Polisario incendiara "voluntariamente" el campamento de tiendas de campaña que habían establecido en la zona, tras lo cual huyeron en "jeeps y camiones hacia el este y el sur, bajo la mirada de los observadores de la MINURSO (Misión de Naciones Unidas para el referéndum en el Sahara Occidental)".
COMPROMISO DE LA ONU PARA MANTENER EL ALTO EL FUEGO
Ante el intercambio de acusaciones y ofensivas, el secretario general de la ONU, António Guterres, ha lamentado que sus esfuerzos para evitar la actual escalada de tensión entre Marruecos y el Frente Polisario en la zona de El Guerguerat no hayan tenido éxito y se ha mostrado preocupado por las consecuencias que los últimos acontecimientos puedan tener.
Guterres ha reiterado su compromiso con hacer lo que esté en su poder para "evitar el colapso del alto el fuego que lleva en vigor desde el 6 de septiembre de 1991" y se ha mostrado "decidido a hacer todo lo posible para eliminar todos los obstáculos para la reanudación del proceso político".
Por último, el portavoz de la ONU ha recalcado que la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental (MINURSO) "está comprometida con seguir cumpliendo su mandato" por lo que Guterres ha pedido a las partes que permitan "plena libertad de movimiento" a la misma.