BRUSELAS, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) se ha defendido este viernes asegurando que las "graves" irregularidades en materia de Derechos Humanos que la Oficina antifraude europea (OLAF) detectó en sus actividades en Grecia durante 2020 son "prácticas del pasado" tras las que se han tomado medidas correctivas.
La agencia de control de fronteras reacciona así ante los casos de devoluciones en caliente y otros incidentes graves en materia de Derechos Humanos que tuvieron lugar hace dos años en las costas griegas ante agentes de Frontex, según un informa de OLAF cuyo contenido fue desvelado el jueves por distintos medios y organizaciones europeas.
En un comunicado difundido este viernes, Frontex confirma que el estudio de OLAF "proporciona una instantánea de una serie de eventos que ocurrieron desde la primavera hasta finales de otoño de 2020 en el contexto de supuestas violaciones de los Derechos Fundamentales" y añade que "son prácticas del pasado".
Entre los casos de "mal comportamiento grave" de personal de Frontex, dice la agencia, el informe señala las trabas al encargado de Derechos Fundamentales de Frontex para acceder a la información de las operaciones, en contra de las propias reglas de este cuerpo de fronteras, así como para procesar las denuncias graves.
El documento de OLAF, además, advierte de que los intentos de agentes de alertar a la jerarquía de Frontex de los incidentes más graves fueron "descaradamente ignorados" por los responsables.
El entonces director de Frontex, Fabrice Leggeri, presentó finalmente su dimisión en abril de 2022 tras las primeras filtraciones del informe de OLAF y la agencia Frontex decidió dar por cerrado el asunto sin continuar investigando responsabilidades en el resto de la agencia por las ilegalidades.
Con todo, Frontex defiende que desde los episodios frente a las costas griegas en 2020 se han tomado medidas correctivas y asegura que escucha los hallazgos de investigadores, auditores y "otras formas serias de escrutinio" para tomarlo como "oportunidades" de cambio y mejora.
Frontex "se compromete a ofrecer una agencia que funcione bien y cumpla con las leyes que se adhiera a las mejores prácticas de buen gobierno", dice el comunicado, que sostiene que "en tiempos difíciles como los que Europa y sus vecinos enfrentan ahora, esto es más importante que nunca".