MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
El petrolero atacado a última hora del martes en el golfo de Omán, propiedad de un millonario israelí, habría sido alcanzado por un dron lanzado desde territorio iraní, según fuentes de las Fuerzas de Defensa de Israel.
Una fuente de Defensa israelí ha señalado este jueves en la emisora Galatz, radio operada por las Fuerzas de Defensa de Israel, que el dron habría sido lanzado desde territorio iraní, según ha recogido el diario 'The Times of Israel'.
De hecho, este mismo jueves, la cadena CNN ha publicado unas imágenes en su versión en árabe en las que se muestra un agujero en el armazón del navío, llamada 'Pacific Zircon', así como los restos de un dron.
El barco atacado estaba transitando por el golfo de Omán cuando fue alcanzado por un dron en el golfo de Omán. Tanto Israel como Estados Unidos apuntan a que el aparato no tripulado es de fabricación iraní.
El incidente tuvo lugar horas después de que la Quinta Flota de Estados Unidos anunciara la interceptación en el golfo de Omán de un "buque pesquero" que trasladaba a los huthis "ayuda letal", incluida "una gran cantidad de materiales explosivos", de parte de Irán, sin que Teherán se haya pronunciado al respecto.
Irán, según ha destacado la parte israelí, habría hecho uso de un dron Shahed-136, un modelo que, dice, Teherán ha estado suministrando recientemente a Moscú en el marco de su ofensiva contra Ucrania, iniciada hace ya cerca de nueve meses.
Las autoridades estadounidenses también han acusado a Irán de haber atacado con un dron el petrolero, un suceso que, según el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, amenaza "aún más" la libertad de navegación en la zona.
Por su parte, el Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM) ha especificado que "un vehículo aéreo no tripulado de fabricación iraní llevó a cabo un ataque unidireccional" contra la embarcación, que porta la bandera de Liberia.
"Este ataque (...) demuestra, una vez más, la naturaleza desestabilizadora de la actividad maligna iraní en la región", ha indicado en un comunicado el general Michael Erik Kurilla, comandante del Mando Central de Estados Unidos.