BAGDAD, 29 May. (Reuters/EP) -
Las Fuerzas de Movilización Popular, una organización paramilitar iraquí integrada principalmente por chiíes y apoyada por Irán, ha anunciado este lunes que ha expulsado a Estado Islámico de varias localidades situadas en la frontera con Siria, una maniobra que podría debilitar el control que los yihadistas tienen en la frontera.
En concreto, las FMP han logrado penetrar en la región de Baaj, en el extermo noroccidental de Irak, según han informado en un comunicado en el que atribuyen los avances a un "milagro del Ramadán", el mes sagrado musulmán que ha comenzado este fin de semana.
Este avance podría habilitar una vía de comunicación entre las milicias chiíes iraquíes proiraníes y las fuerzas afines al presidente de Siria, Bashar al Assad, también aliado de Teherán, que se traduciría en la entrega de armamento a las fuerzas sirias.
La comunicación entre Al Assad y las Fuerzas de Movilización Popular perjudicaría fundamentalmente a las milicias rebeldes sirias, en retroceso desde hace unos meses ante el avance de las fuerzas gubernamentales, apoyadas por la milicia chií libanesa Hezbola, afín igualmente a Teherán.
Sin embargo, aunque los paramilitares chiíes alcancen la frontera, en ella se encontrarán con las Fuerzas de Defensa Sirias (FDS), una coalición liderada por las milicias kurdas y aliadas de Estados Unidos, por lo que la comunicación con las fuerzas 'assadistas' o el envío de armamento no será fácil.
Las FMP dependen formalmente de las autoridades iraquíes, pero cuentan con asesores iraníes, incluidos altos mandos. Un general iraní ha muerto precisamente durante el fin de semana en la ofensiva hacia el oeste.