ARGEL/TÚNEZ, 19 Mar. (Reuters/EP) -
Los francotiradores de las fuerzas leales al mandatario libio, Muamar Gadafi, continúan disparando a la población en Misrata, al oeste del país, mientras el principal hospital de la localidad ha tenido que dejar de tratar a los heridos por haber agotado la existencia de anestésicos, según han informado varios residentes.
Situada a unos 200 kilómetros al este de Trípoli, Misrata es el principal feudo de los rebeldes en el oeste del país y sus residentes han asegurado que las fuerzas del régimen continúan intentando tomar el control de la ciudad a pesar del alto el fuego declarado por el Gobierno ayer.
Los residentes de Misrata han asegurado que la ciudad ha sido bombardeada esta mañana aunque con menor intensidad que el día anterior. Además han explicado que la localidad está afrontando una crisis humanitaria porque por tercer día consecutivo se mantiene cerrado el suministro de agua. "Te lo estoy diciendo, estamos asustados y estamos solos", ha explicado a Reuters por teléfono un residente identificado como Saadoun.
"Hemos tenido dos muertos esta mañana, no por los bombardeos sino porque hay francotiradores en algunas viviendas y están disparando a la gente. Están disparando a cualquiera que ven", ha relatado Saadoun. El residente ha indicado que esta mañana la ciudad ha sido bombardeada por dos tanques, que ya han dejado de disparar aunque "la destrucción por el bombardeo de ayer es enorme". "Hay destrucción por todas partes. En mezquitas y casas. Nada se ha librado", ha dicho Saadoun.
"Todos estamos asustados aquí. La gente de Misrata está asustada. Sentimos que llega una crisis humanitaria. No hay agua desde hace más de tres días ni electricidad", ha explicado. Las informaciones sobre lo sucedido en esta localidad del oeste del país no han podido ser confirmadas de manera independiente porque el Gobierno libio ha impedido a los periodistas que accedan a la ciudad.
El Ejecutivo libio ha negado que esté atacando a los rebeldes y mantiene que está cumpliendo el alto el fuego que anunció ayer tras la aprobación de la resolución de Naciones Unidas que avala el establecimiento de una zona de exclusión aérea.
"(Las fuerzas de Gadafi) han bombardeado la ciudad con cuatro o cinco proyectiles de artillería hoy a primera hora de la mañana. La situación está relativamente en calma ahora pero ellos aún están a las afueras de la ciudad", ha indicado a Reuters un residente llamado Mohammed.
Otro residente, que ha hablado con Reuters vía Skype por el mal funcionamiento de las líneas telefónicas, ha asegurado que los bombardeos de esta mañana han causado al menos siete muertos que han sido llevados al hospital de Misrata.
"No podemos tolerarlo más. Nuestro hospital sufre carencias graves: sin medicina, sin anestésicos... El hospital está saturado, no podemos trabajar más", ha explicado. La población de Misrata, la tercera ciudad del país, se unió a la revolución contra Gadafi hace un mes, aunque permanece desconectada del principal bastión rebelde, Benghazi, desde que las fuerzas gubernamentales la rodearon. En los últimos días, ha estado sometida a los ataques de la artillería y los tanques de las fuerzas de Gadafi para intentar recuperarla.