El futuro primer ministro de Austria, Kurz, pide más tiempo para forjar una coalición

Diversas voces alertan del riesgo de pactar con el "lobo" de la ultraderecha

VIENA, 23 Oct. (Reuters/EP) -

El líder del Partido Popular de Austria (ÖVP), Sebastian Kurz --que ganó las elecciones celebradas el 15 de octubre--, ha anunciado este lunes que necesita más tiempo para decidir con qué partido comenzar las conversaciones para la formación de una coalición y no ha descartado la posibilidad de aliarse con la extrema derecha.

El ÖVP ganó las elecciones parlamentarias hace una semana con un 31,5 por ciento de los votos, lejos de conseguir mayoría, lo que significa que dependerá de la coalición con algún aliado para formar un Gobierno estable.

Se esperaba que Kurz revelase este lunes con qué partido iniciaría las conversaciones para la formación de una coalición, tras haber mantenido contactos durante el fin de semana con los principales líderes de los partidos políticos del Parlamento.

Tras su reunión en la jornada de hoy con el presidente de la república austriaca, Alexander Van der Bellen, Kurz ha asegurado que aún no ha decidido con quién iniciar las negociaciones y ha añadido que aclarará esa cuestión "en las próximas horas o en los próximos días". Kurz ha explicado que existen cuestiones que le gustaría discutir y esclarecer previamente de manera "informal" antes de iniciar las negociaciones.

Los líderes europeos han expresado su preocupación ante la posible vuelta al poder de la formación ultraderechista Partido de la Libertad de Austria (FPÖ), fundado en la década de los 50 por miembros nazis y presente en el por última vez en el Ejecutivo austriaco hace más de una década.

Los ultraderechistas ya discutieron en su momento la necesidad de pertenecer a la Unión Europea. Sin embargo, la idea de unión dentro del bloque se ha vuelto una corriente cada vez más dominante y ha empujado al FPÖ a dejar atrás el empleo de determinados términos y expulsar a quienes realizaran declaraciones antisemitas.

Kurz, de 31 años, ha asegurado que cualquier futuro Gobierno que surja será proeuropeo, aunque su campaña antiinmigración --que guardaba similitudes con otra anterior del FPÖ-- tras la crisis migratoria vivida en Europa hizo creer a muchos votantes que Austria se estaba excediendo.

¿EL LOBO MANSO?

Solo dos formaciones cuentan con los escaños suficientes para darle a Kurz la mayoría que necesita: el Partido Socialdemócrata de Austria (SPÖ), que quedó segundo en las elecciones del día 15, y el FPÖ, que fue la tercera fuerza política más votada.

Una alianza entre los dos partidos tradicionales no se ha planteado por ser la que menos probabilidades tendría de triunfar, aunque hayan gobernado juntos durante 44 de los 72 años que han pasado desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.

Kurz forzó la celebración de elecciones anticipadas tras asumir la presidencia del ÖVP después de la renuncia del vicecanciller austriaco y, hasta ese momento, líder del Partido del Pueblo (ÖVP), Reinhold Mitterlehner. El desacuerdo entre ambas formaciones, el ÖVP y el SPÖ, ha llevado a los socialdemócratas a asegurar este lunes que barajaban la posibilidad de unirse a la oposición.

En principio, sin embargo, cualquier acuerdo entre al menos dos de las tres principales fuerzas políticas es posible y ninguna de esas opciones ha sido descartada aún, incluyendo una posible 'coalición de perdedores' integrada por a el FPÖ y los socialdemócratas. Kurz tampoco ha descartado la formación de un Gobierno en minoría en el supuesto de que fracase en su intento de formar una coalición.

Por su parte, el líder del principal grupo judío de Austria, Oskar Deutsch, ha advertido este lunes a Kurz de que no realice negocios con "el lobo", en referencia al FPÖ. Deutsch ha declarado en una carta abierta a las dos formaciones de centro que aunque "los lobos nacionalistas se pongan piel de oveja azul" eso no cambia su naturaleza y es "solo apariencia".

El azul es el color del FPÖ, firmemente antislámico. Ahora corteja a los votantes judíos, aunque sin mucho éxito. Deutsch ha subrayado que si el ÖVP y el SPÖ "creen que pueden domar al lobo, se están engañando a sí mismos".

Sin embargo, un juez judío del FPÖ, Davis Lasar, ha contestado que el FPÖ "siempre ha estado comprometido con las seguridad de la población judía de Austria".