MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
El expresidente marfileño Laurent Gbagbo cuenta ya con su pasaporte como ciudadano de Costa de Marfil así como con un pasaporte diplomático y está preparando su regreso al país para antes de que finalice el año, según ha informado su abogada.
Gbagbo, que vive actualmente en Bélgica, había iniciado el pasado mes de julio el procedimiento administrativo para recuperar su pasaporte con vistas a poder regresar a Costa de Marfil.
El expresidente fue absuelto en 2019 por el Tribunal Penal Internacional (TPI) de los cargos por crímenes contra la Humanidad presentados contra él por su papel en la crisis postelectoral entre 2010 y 2011 después de que se negara a reconocer su derrota ante Alassane Ouattara, quien el 31 de octubre fue reelegido para un tercer mandato.
Actualmente, está a la espera de que se absuelva la apelación de la Fiscalía pero no está detenido, por lo que a priori puede volver a su país mientras se resuelve el trámite pendiente.
En un comunicado recogido por la emisora RFI, su abogada Habiba Touré ha confirmado que el antiguo mandatario ha recibido los dos pasaportes, un gesto que considera que va "en el sentido del apaciguamiento" toda vez que la concesión del pasaporte diplomático tiene que hacerse con el aval del presidente.
Ahora, Gbagbo quiere poder regresar a Costa de Marfil a lo largo del mes de diciembre, por lo que ha encargado a Assoa Adou, secretario general de su partido, el Frente Popular Marfileño (FPI), que "contacte con las autoridades competentes con el fin de organizar su retorno en la tranquilidad conforme a su estatus de antiguo presidente de la república".
PIDE LA LIBERACIÓN DE LOS POLÍTICOS ENCARCELADOS
Por otra parte, Gbagbo ha aprovechado para exigir la liberación de los líderes políticos detenidos a raíz de las controvertidas elecciones de octubre, boicoteadas por su partido. Entre los detenidos figura precisamente el candidato presidencial del FPI, Pascal Affi N'Guessan.
"No se puede encarcelar a los líderes porque esto hicieron valer su derecho de decir no a un tercer mandato inconstitucional", ha sostenido Gbagbo mediante el citado comunicado de su abogada. Así, ha exigido su liberación inmediata y "el retorno seguro de los exiliados" con el fin de restaurar un clima de confianza en el país.
Tanto Affi N'Guessan como el expresidente Henri Konan Bédié, candidato también a la Presidencia, hicieron un llamamiento a la desobediencia civil y el boicot para denunciar que la candidatura de Ouattara era ilegal, según la Constitución, y criticar la eliminación de otros importantes opositores de la carrera electoral.
Más de 50 personas han muerto en el país en la violencia desatada por los comicios, tanto durante la jornada electoral como en días posteriores. Desde entonces, Ouattara mantuvo un encuentro con Bédié para intentar apaciguar la situación, pero dicho diálogo no ha tenido por ahora continuación.