MADRID 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente afgano, Ashraf Ghani, ha nombrado este jueves a Masud Andarabi como jefe de la Dirección de Nacional de Seguridad (NDS, el servicio de Inteligencia afgano), tras la dimisión del anterior titular del cargo, Rahmatulá Nabil, por discrepancias políticas con el acercamiento del mandatario a Pakistán, según ha informado la cadena de televisión Tolo.
La renuncia de Nabil y el nombramiento del nuevo máximo responsable de la DNS han sido aprobados en una reunión de urgencia celebrada este jueves por la noche y que ha contado con la asistencia del presidente afgano y del primer ministro del país, Abdulá Abdulá. Ghani ha confirmado en un comunicado el relevo al frente del servicio de Inteligencia.
"Basándonos en las consultas que hemos realizado, Masud Andarabi asumirá la gestión de la Dirección Nacional de Seguridad", ha señalado. Andarabi ha ejercido hasta este jueves el puesto de 'número dos' en la agencia de Inteligencia afgana. En su escrito, el presidente afgano ha elogiado a las personas que trabajan en la DNS para dar seguridad al pueblo afgano y al jefe saliente.
"El presidente, al aceptar la renuncia del ingeniero Rahmatulá Nabil de la presidencia de la Dirección Nacional de Seguridad, expresa su gratitud hacia él por mantener al país seguro", ha asegurado el mandatario.
Ghani ha hecho hincapié en que la DNS debe seguir trabajando para detectar y anular las amenazas de seguridad y ha expresado su confianza en que logre más avances en el futuro.
CRÍTICAS EN FACEBOOK
La renuncia de Nabil ha llegado horas después de que el miércoles, a última hora de la noche, publicara un mensaje en su perfil oficial de Facebook en el que criticaba el acercamiento del presidente afgano y el primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif. Ambos dirigentes se habían reunido en Islamabad para acordar la reanudación de las conversaciones de paz con los talibán afganos.
El jefe de los servicios de Inteligencia lamentaba que mientras Ghani fuera recibido con honores en Pakistán, cuando civiles inocentes afganos morían en el ataque talibán contra el aeropuerto de Kandahar o contra un distrito de Helmand, entre otros. Asimismo, ponía en tela de juicio la creciente interferencia de Pakistán en los asuntos internos de Afganistán.
En su carta de renuncia, publicada por los medios locales, Nabil ha insistido en sus críticas a Ghani. "Desgraciadamente, en los últimos meses, el entorno de trabajo se volvió un poco difícil para mí, ya que no compartía los puntos de vista sobre determinadas políticas, lo que también minó el entorno de confianza en mi área de trabajo", ha explicado.
Nabil ha denunciado que sufrió una "presión limitada por parte de su eminencia (Ghani)", así como "peticiones persistentes" para que presentara su "dimisión", lo que "probablemente" le impidió continuar su "trabajo".