MADRID, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los más de 300 estudiantes que fueron secuestrados el viernes pasado en una escuela secundaria del estado nigeriano de Katsina, en el noroeste, han sido trasladados a los bosques de Zamfara, el estado vecino, y ya están en marcha negociaciones con sus captores, según ha desvelado el gobernador regional, Aminu Masari, que sostiene que Boko Haram no está detrás del rapto.
En declaraciones a última hora del miércoles a la BBC, Masari señaló que tienen "información" de que los rehenes "están en los bosques de Zamfara" y precisó que ya se ha entablado contacto con los secuestradores.
"Estamos negociando con los que secuestraron a los estudiantes y queremos asegurarnos de que logramos su liberación", precisó, negando que el grupo terrorista Boko Haram esté detrás del rapto, como reivindicó su líder, Abubakar Shekau, este martes.
Así, insistió en que el secuestro fue obra de bandidos locales, como han venido sosteniendo en todo momento las autoridades. "Uno no puede decir con precisión si Boko Haram está (presente en Katsina) pero (los secuestradores) no son Boko Haram, no son miembros conocidos de Boko Haram", subrayó.
No obstante, Masari señaló que quizá el grupo terrorista les ayudó "con entrenamiento o alguna otra ayuda, pero todos los nombres que tenemos hasta ahora son nombres de bandidos locales". Así las cosas, recalcó que las autoridades no negociarán con Boko Haram ni pagarán ningún rescate.
Boko Haram difundió un vídeo el martes en el que su líder reivindicaba el secuestro. "Lo que ha sucedido en Katsina se ha hecho para promover el islam y desalentar las prácticas no islámicas de la educación occidental, que no es el tipo de educación permitido por Alá y su sagrado profeta", señaló Shekau.
"Tampoco se está enseñando lo que Alá y su sagrado profeta mandaron. En lugar de eso están destruyendo el islam. Puede ser sutil pero Alá, el dios de los cielos y la tierra, conoce todo lo que está escondido. Que Alá promueva el islam y que nosotros podamos morir como musulmanes", subrayó Shekau, en su mensaje, al que ha tenido acceso HumAngle.
El secuestro de los más de 300 estudiantes niños en el instituto de secundaria de Kankara supone la mayor operación de Boko Haram en el noroeste de Nigeria, donde había limitado sus acciones a emboscadas contra las fuerzas de seguridad y secuestros a pequeña escala a cambio del pago de rescates.
Además, ha traído a la memoria el rapto en abril de 2014 a 276 niñas de un colegio de Chibok, en el estado de Borno, de las que 112 todavía permanecen en paradero desconocido y 164 fueron liberadas. El secuestro provocó una ola de condenas, no solo a nivel nacional, sino también a nivel internacional y generó un movimiento, #BringBackOurGirls, que se mantiene a día de hoy y que apoya a las familias de las víctimas.