MADRID 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Australia ha presentado este jueves un proyecto de ley que incluye penas de hasta siete años de prisión por la comisión de delitos de odio y la vulneración de los datos personales de la población, tal y como ha informado la Fiscalía del país.
"El Ejecutivo de (Anthony) Albanese presentó un proyecto de ley que contempla sanción penal por las nuevas infracciones y fortalece la protección ante los delitos de odio", ha indicado la entidad en un comunicado.
Estas modificaciones incluyen penas de hasta cinco años de prisión por amenazas o uso de la fuerza contra individuos o grupos. En caso de que estas amenazas sean dirigidas hacia las autoridades, las sentencias pueden recrudecerse hasta implicar siete años de cárcel, la misma pena establecida para los delitos más graves de revelación de datos personales sin consentimiento.
Se trata de las primeras medidas puestas en marcha por Canberra para otorgar a los australianos un mayor control sobre sus datos en Internet después de que el pasado mes de febrero se filtraran los datos de unos 600 judíos australianos a raíz del aumento de la tensión provocada por la ofensiva israelí contra la Franja de Gaza.