MINSK, 9 Mar. (Reuters/EP) -
El presidente bielorruso, Alenxander Lukashenko, ha anunciado este jueves que no implementará en 2017 la conocida popularmente como "ley contra los parásitos sociales", después de que miles de bielorrusos salieran a la calle para protestar en contra de la normativa.
La legislación ordenaba que aquellos ciudadanos que trabajen menos de 183 días al año (alrededor de seis meses), deben pagar al Gobierno de Bielorrusia un total de 236 euros como compensación por todos los impuestos que no pagan anualmente al no trabajar.
La iniciativa del Gobierno no ha sido bien acogida entre los bielorrusos, ya que la inmensa mayoría de la población tiene que hacer frente a grandes dificultades para llegar a fin de mes, después de dos años de recesión económica.
El mes pasado, más de 2.000 personas se concentraron en la capital, Minsk, para manifestarse en contra del impuesto, protagonizando la mayor protesta que ha tenido lugar en el país en los últimos seis años. Las manifestaciones han continuado celebrándose durante todo el mes y de acuerdo con los principales grupos opositores, hay más concentraciones convocadas para marzo.
"No vamos a recaudar los fondos que debemos de 2016 de aquellos que se suponía que debían pagarlo", ha dicho Lukashenko, según la agencia estatal de notivias, Belta. El mandatario ha añadido que su Gobierno revisará la ley, pero que no va a retirar la normativa.
El presidente, que en una ocasión se describió a sí mismo como el "último dictador en Europa", lleva al frente del Gobierno bielorruso desde 1994. De acuerdo con los expertos, sus políticas económicas no difieren demasiado de las de la Unión Soviética, uno de los motivos detrás de la grave crisis financiera que sufre el país.
En un intento de mejorar la relación de Bielorrusia con la Unión Europea --y acabar con la dependencia del país de Rusia-- Lukashenko ha intentado mostrar una mayor indulgencia con la oposición política. El presidente ha añadido que aquellos que ya hayan pagado el impuesto "contra parásitos sociales" en 2016 recibirán un reembolso si consiguen encontrar trabajo en 2017.
Según la última inspección de Hacienda en el país, alrededor de 470.000 personas deberían haber pagado el polémico impuesto en 2016, pero sólo lo pagaron 50.000.