LONDRES, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno británico publicará este miércoles un documento oficial donde explicará sus intenciones hacia Irlanda del Norte durante y después del proceso de salida de la Unión Europea, y en la que contempla una división "sin fronteras físicas o puestos fronterizos".
Diariamente unas 30.000 personas atraviesan la frontera sin necesidad de controles. sin embargo, los negociadores británicos temen que la salida de la UE inflame tensiones en una zona donde todavía perviven los efectos del conflicto norirlandés, casi 20 años después de los Acuerdos del Viernes Santo.
"Lo que ambas partes necesitan es algo de flexibilidad e imaginación en lo que se refiere con la frontera norirlandesa", ha declarado una fuente del gobierno británico, que de momento contempla dos tipos de acuerdos fronterizos con la UE: uno sin frontera y otro con leves controles. Para fuentes de Bruselas, esta idea de "fronteras invisibles" es una "fantasía", según la agencia Reuters.
Fuentes del Gobierno británico, por contra, han reiterado que sus negociadores parten desde "unos principios muy claros: la ausencia de una frontera física, que pudiera significar un retorno al pasado, y que resulta completamente inaceptable".
A pesar de que los negociadores británicos dan por descartado un acuerdo "sin fricciones", su deseo es el de mantener en lo que al conjunto territorial irlandés se refiere una Zona de Viaje Común, de libre movimiento, y sin controles fronterizos marítimos en las aguas que separan Inglaterra, Gales y Escocia de Irlanda e Irlanda del Norte, por considerar que "no son viables, ni desde un punto constitucional ni económico".
Sobre el proceso de paz, el Gobierno irlandés ha considerado que se trata de "un hecho crucial que en modo alguno debe convertirse en una ficha de negociación", en particular en lo que se refiere a su traducción política: la creación de la asamblea electa multipartita de Belfast.