NUEVA YORK, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, ha condenado este viernes las declaraciones "irrespetuosas" del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la Asamblea General de la ONU y ha advertido de que el régimen castrista no renunciará a sus "principios" ni aceptará "imposiciones".
Rodríguez se ha subido al atril de la Asamblea tres días después de que lo hiciese Trump, que en este mismo foro confirmó que no levantaría las sanciones impuestas a la isla hasta que emprendan "reformas fundamentales". También aludió al socialismo como un modelo fracasado.
Para el jefe de la diplomacia cubana, las políticas de Trumo hacia Cuba suponen un "retroceso" en relación a las bases establecidas por su predecesor, Barack Obama, que dio paso a un "nuevo tipo" de enfoque basado en "el respeto y la igualdad".
Rodríguez ha denunciado que la posición de la Casa Blanca contraviene los deseos de "amplios sectores estadounidenses" y sólo satisfacen a un grupo de personas de origen cubano "cada vez más aislado y minoritario" y que quiere castigar a toda costa a Cuba "por haber elegido defender, a cualquier precio, el derecho a ser libre, independiente y soberano".
"Cuba nunca aceptará condicionamientos ni imposiciones, ni renunciará a sus principios", ha advertido Rodríguez, que ha tachado de "irrespetuosas, ofensivas e injerencistas" las últimas declaraciones de Trump. "Le recordamos que Estados Unidos, donde se cometen flagrantes violaciones de los Derechos Humanos que suscitan profunda preocupación en la comunidad internacional, no tienen la mas mínima autoridad moral para juzgar a mi país", ha apostillado.
Rodríguez, no obstante, ha apuntado que los dos países pueden "cooperar y convivir" siempre y cuando respeten sus "diferencias" y promuevan los beneficios de ambos, sin concesiones. Así, ha proclamado que "el pueblo cubano no cesará en su legitimo reclamo por el levantamiento y total eliminación del bloqueo económico, comercial y financiero", para lo cual volverá a presentar el 1 de noviembre una solicitud de condena contra este embargo ante la Asamblea General.
INCIDENTES DIPLOMÁTICOS
El jefe de la diplomacia cubana también se ha referido a los "incidentes" denunciados por Washington contra su personal diplomático en La Habana y ha rechazado "categóricamente" que el Gobierno de Raúl Castro tenga algo que ver. En este sentido, ha alegado que garantiza la protección de todos los diplomáticos extranjeros "sin excepción".
Las autoridades cubanas, ha añadido, "no cuentan con evidencia alguna que confirme las causas ni el origen de las afecciones a la salud que han sido reportadas por los diplomáticos estadounidenses y sus familiares", aunque ha pedido la cooperación "efectiva" de Estados Unidos para zanjar cualquier sospecha.
"Sería lamentable que se politice un asunto de la naturaleza descrita", ha advertido, después de que en estos últimos meses el Gobierno norteamericano haya confirmado la atención médica e incluso la evacuación de trabajadores que, según han revelado posteriormente varios medios, habrían sufrido ataques acústicos.