LONDRES, 17 Jul. (Reuters/EP) -
El ministro de Relaciones Exteriores de Emiratos Árabes Unidos (EAU), Anwar Gargash, ha dicho este lunes que su país no es responsable del ataque informático perpetrado en mayo contra la agencia estatal qatarí de noticias, QNA, en el que se publicaron unas declaraciones falsas del emir del país, Tamim bin Hamad al Zani, que desencadenaron en una crisis diplomática en la región.
"La información de 'The Washington Post' de hoy que asegura que nosotros 'hackeamos' a los qataríes no es cierta", ha dicho Gargash al instituto de relaciones internacionales Chatham House. El ministro ha informado de que Emiratos Árabes Unidos no presionará a las empresas para que escojan entre un país u otro.
No obstante, en una entrevista al margen del evento de Chatham House, Gargash ha dicho que las potencias del Golfo están en proceso de negociación para aplicar sanciones adicionales sobre Doha.
"Endureceremos algunos tornillos", ha dicho Gargash. "Veremos cuáles son estos tornillos", ha añadido, "si son financieros, u otros, pero están completamente dentro de nuestras competencias como estados soberanos", ha matizado Gargash sin dar detalles sobre cuándo podrían introducirse las nuevas medidas.
Gargash también ha sugerido que se supervise internacionalmente a Qatar y ha aclarado que no hay prevista una reunión entre las dos partes en conflicto auspiciada por Kuwait, un país neutral que busca mediar en el conflicto. "Es demasiado temprano para hablar de reuniones si no obtenemos antes un mediador con cierta tracción", ha dicho.
Según informaron fuentes de los servicios de Inteligencia de Estados Unidos citadas por 'The Washington Post' este lunes, altos cargos del Gobierno de EAU idearon el ataque informático a QNA en el que se publicaron unas declaraciones en las que se reconocía a Irán como "un poder islámico" y alababan al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
QNA retiró inmediatamente la publicación denunciando un 'hackeo' y tras ello, las autoridades de Arabia Saudí, Bahréin, Egipto y Emiratos Árabes Unidos (EAU) rompieron sus relaciones con Qatar y declararon un boicot diplomático y comercial, denunciando el presunto apoyo de Qatar a "grupos terroristas" y presentando trece exigencias que Doha ha tildado de "injustificadas".
Por su parte, el embajador emiratí en Estados Unidos, Yusef al Otaiba, ha afirmado que las informaciones del citado diario son "falsas", recalcando que el país "no tuvo papel alguno en el supuesto 'hackeo' descrito en el artículo".
Las informaciones publicadas por 'The Washington Post', que no obstante han aclarado que se desconoce por el momento si EAU lo llevó a cabo o contrató a otra parte para ejecutarlo, llegan después de que correos electrónicos supuestamente 'hackeados' de la cuenta privada del propio Al Otaiba en la que se revela el papel de EAU para influir a Estados Unidos a distanciarse de Qatar en todos los asuntos en disputa.
Las relaciones entre Qatar y otros países del Golfo ya sufrieron un periodo de tensión en 2014 debido al supuesto apoyo de Doha a Hermanos Musulmanes, organización ilegalizada en la mayoría de los países del golfo.
Sin embargo, en dicha ocasión las medidas no fueron tan duras, y sólo implicaron la retirada de los embajadores. En esta ocasión, ha supuesto además la expulsión de ciudadanos del país, así como el cierre de las vías a medios de transporte llegados de Qatar.