MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Comisión de Medios de Comunicación del Gobierno de Irak ha anunciado la suspensión de las retransmisiones del canal kurdo Rudaw TV, así como la anulación de las acreditaciones de prensa para todo su personal y la incautación de todo el material perteneciente a la cadena.
De acuerdo con el texto, el Gobierno argumenta que el canal no tenía la licencia pertinente para retransmitir y que algunos programas "incitaban a la violencia, al odio y atentaban contra la seguridad y la paz social".
El propio medio ha sido el encargado de comunicar esta información a través de su agencia de noticias del mismo nombre y, además de negar todas las acusaciones, asegura que nunca recibió notificación oficial del decreto, con fecha del pasado día 23 de octubre.
El conglomerado Rudaw Media Network está licenciado, recuerda la agencia, por el Ministerio de Cultura del Gobierno regional del Kurdistán. Esta región celebró el pasado 25 de septiembre un referéndum de independencia que se saldó con la rotunda victoria de los partidarios de la separación de Irak.
La cadena mantiene que el conglomerado al que pertenece "opera dentro del Gobierno federal iraquí" y que esta decisión esconde un carácter político así como un plan premeditado que pone en peligro a todos los trabajadores del medio.
"Hacemos abierta y legalmente responsable al Gobierno de Bagdad de la seguridad de todos los empleados y consideramos que esta decisión es ilegal y es un acto de intimidación contra Rudaw y contra la libertad de prensa en el país", según el comunicado de la compañía.
Días después del referéndum, las fuerzas de seguridad iraquíes lanzaron una ofensiva sobre la ciudad de Kirkuk, disputada entre el Kurdistán e Irak. "Nuestros equipos han trabajado legalmente en esa ciudad hasta dos días antes de la entrada de las tropas iraquíes y a pesar de haber recibido amenazas desde Bagdad", ha lamentado la emisora.
Rudaw hace finalmente un llamamiento al Gobierno iraquí, a las instituciones del Estado iraquí, a Naciones Unidas, a la UE y a los diferentes sindicatos y organizaciones de periodistas para que hagan todo lo posible para restaurar la situación.