Este jueves hizo lo propio con los Presupuestos de 2021 y evitó la convocatoria de elecciones anticipadas
MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El Parlamento de Israel ha aprobado este viernes de madrugada los Presupuestos para el próximo 2022 y refuerza así la estabilidad del Gobierno de coalición liderado por Naftali Bennett como primer ministro.
La Knesset ha dado su visto bueno a las cuentas --con 59 votos a favor y 56 en contra-- y hace que el Ejecutivo supere uno de los grandes retos a los que se enfrentaba y que, por tanto, sume un gran éxito en su haber, tal y como ha recogido 'The Times of Israel'.
La legislación ha sido aprobada apenas un día después de que este jueves, también de madrugada, el Parlamento diese luz verde a los Presupuestos de 2021, la primera vez que se lograba en los últimos tres años y medio, y evitaba la disolución del Gobierno y la convocatoria de elecciones anticipadas.
La coalición está formada por una amalgama de partidos, como Azul y Blanco, el Partido Laborista, Yisrael Beiteinu, Meretz y Nueva Esperanza, además de Yesh Atid, Yamina y la Lista Árabe Conjunta. Así, controla 61 de los 120 escaños de la Knesset.
Los Presupuestos de 2021 fueron los primeros que aprueba la Knesset desde 2018, cuando el país se vio sumido en una grave crisis política que derivó en la celebración de cuatro elecciones anticipadas en dos años debido a la incapacidad de los partidos para ensamblar coaliciones ante la ausencia de mayorías.
Ahora, la coalición ha sacado adelante las cuentas para el próximo año mucho antes de marzo de 2022, fecha máxima establecida, no como en el caso de los Presupuestos de 2021, que han salido adelante apenas diez días antes de la fecha estipulada para la disolución automática del Gobierno y convocatoria de nuevas elecciones si no lograba los apoyos para dicho fin.
Así, el primer ministro israelí ha celebrado en redes sociales el haber vuelto a "encaminar a Israel"; mientras que el ministro de Exteriores, Yair Lapid, ha celebrado haber "cumplido" con la promesa de aprobar los Presupuestos de 2021 y 2022.
El ministro de Defensa Benjamin Gantz, cuyo acuerdo en 2020 para un Gobierno en rotación con Benjamin Netanyahu fracasó por la falta de un acuerdo sobre los Presupuestos, ha resaltado que se trata de "una victori para el país, pero también una victoria personal".
"Los que actuaron siguiendo intereses personales y causaron un gran daño al país y sus ciudadanos están ahora en la oposición, y los que trabajan por los ciudadanos israelíes están en la coalición (gubernamental)", ha señalado.
En esta línea se ha expresado el ministro de Justicia, Gideon Saar, quien ha manifestado que "la conspiración de la oposición para arrastrar a Israel a unas quintas elecciones ha fracasado". "Nos hemos alejado del abismo y hemos devuelto a Israel al camino de la estabilidad y del trabajo por los ciudadanos", ha añadido.
CRÍTICAS OPOSITORAS
Por contra, el parlamentario del ultraortodoxo Judaísmo Unido de la Torá (UTJ) Uri Malkev ha argüido que los Presupuestos "suponen una compra de poder a un coste sin igual" y ha agregado que el acuerdo "impone recortes económicos a la población y daña la identidad judía del país".
"El destino de este Gobierno es el colapso. No tiene derecho a existir", ha dicho Maklev. Asimismo, el también opositor Shas ha dicho que los Presupuestos "son un golpe brutal e intencionado a los ancianos, los desfavorecidos , los residentes de la periferia y las familias con muchos hijos".
"Shas seguirá luchando con todo su poder contra un Gobierno ilegítimo encabezado por un hombre (Bennett) que no supera el mínimo electoral en las urnas (en referencia a sondeos) y a un Gobierno que trabaja por la destrucción de la sociedad y la ruina del carácter judío", ha remachado el partido.
A lo largo de las dos jornadas de votación en el Parlamento se han sucedido una serie de errores en las votaciones de los diferentes diputados de las formaciones, que incluso han provocado que la decisión final sobre los Presupuestos se haya retrasado varias horas.
La diputada laborista Emilie Moatti, miembro de la coalición, ha votado accidentalmente en contra de una de las cientos de cláusulas de la propuesta, lo que ha provocado un empate a 59 --y, por tanto, la desestimación de la medida-- para la aprobación de un fondo para la construcción de aulas.
Incluso Netanyahu, ahora en la oposición, ha votado accidentalmente a favor de las posiciones del Gobierno y los líderes de su partido, el Likud, han expresado su preocupación por la fatiga acumulada durante la larga jornada.