BEIRUT, 22 Feb. (Reuters/EP) -
El Gobierno libanés ha firmado este lunes que es necesario arreglar la relación con Arabia Saudí después de que Riad suspendiese la pasada semana el programa de ayuda para el Ejército libanés por 3.000 millones de dólares (unos 2.700 millones de euros) para compra de armamento francés.
Arabia Saudí ha suspedido las ayudas en respuesta a la "lamentable e injustificada" decisión de Beirut de no condenar el asalto a la Embajada saudí en Teherán del pasado 2 de enero.
En un comunicado publicado este lunes, el Gobierno libanés asegura que "el Gabinete considera necesario arreglar las relaciones entre Líbano y sus hermanos, y deshacerse de los errores que han surgido en los últimos tiempos" y añade que el primer ministro, Tammam Salam, se ocupará de mejorar las relaciones entre los dos países.
El comunicado señala que Líbano no olvidará el respaldo de Arabia Saudí al acuerdo de paz que dio por finalizada la guerra civil del país de entre los años 1975 y 1990, ni su rol en la reconstrucción el país, ni su apoyo a las "instituciones financieras, económicas, militares y de seguridad".
"Asimismo no olvidará que el reino, y el resto de estados del Golfo Pérsico... recibieron con los brazos abiertos a cientos de miles de libaneses de todos los grupos religiosos", asegura el comunicado. Los países del Golfo son una fuente crucial de empleo para los libaneses.
Respecto al asalto de la embajada saudí del pasado mes, Salam ha asegurado en una conferencia de prensa televisada que el Gobierno, que reúne tanto a aliados como a enemigos de Arabia Saudí, incluyendo a Hezbolá, el partido-milicia chií libanés aliado de Irán, "condena encarecidamente" los ataques.
Por su parte, el exprimer ministro libanés y líder de Al Mustaqbal, Saad Hariri, ha instado este lunes a Arabia Saudi a no abandonar a Líbano. Hariri, que mantiene relaciones muy estrechas con la familia real saudí, le ha pedido al rey Salmán "no olvidar a Líbano y continuar con el apoyo" al país, en unas declaraciones televisadas.
Las ayudas militares fueron anunciadas en 2013 y fueron elogiadas entonces por el presidente de Líbano, Michel Suleiman, como la mayor ayuda recibida jamás por las fuerzas militares libanesas.