MADRID 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Nicaragua y la Organización de los Estados Americanos (OEA) han celebrado esta semana su primera reunión, encuentro anunciado la semana pasada con el objetivo de debatir la situación electoral que vive el país.
En un comunicado difundido por la organización que dirige Luis Almagro han confirmado que el encuentro ha tenido lugar en la capital, Managua, este jueves entre la delegación de la secretaría general de la OEA y la delegación del Ejecutivo de Daniel Ortega.
Las dos partes han acordado establecer una mesa de conversaciones e "intercambio constructivo" que se reunirá dos veces al mes, bien en Managua o en Washington, y en un plazo de tres meses entregar un informe conjunto sobre la situación en el país.
Para ello, han acordado también que el Gobierno de Ortega invite al secretario general de la OEA, Luis Almagro, a visitar Nicaragua el próximo 1 de diciembre "para entrevistarse con las autoridades nacionales y los partidos políticos".
Si bien se buscará que el informe presentado sea conjunto, "de no existir acuerdo" cada parte entregará un documento por separado, tal y como han acordado Almagro y el representante de Nicaragua ante el organismo, Denis Moncada Colindres.
Tras conocerse este acercamiento entre Ejecutivo y OEA, los miembros de la Coalición Nacional por la Democracia (CNL) de Nicaragua han manifestado su esperanza de que éste sirva para demandar la suspensión del proceso electoral, que califican de "farsa".
La coalición, formada por seis organizaciones políticas, quiere que se programen nuevas elecciones "libres y bajo condiciones transparentes y democráticas", además de con la presencia de "nuevas autoridades electorales" y de observadores nacionales e internacionales.
Si bien el informe definitivo conjunto se publicará una vez que se celebren las elecciones --programadas para el 6 de noviembre--, tanto el Gobierno como la OEA se han comprometido a "apoyar el fortalecimiento de las instituciones democráticas del país de acuerdo a los compromisos del estado de Nicaragua con los instrumentos normativos del Sistema Interamericano y su ordenamiento jurídico interno".
AMBIENTE ELECTORAL
Esta petición llega en un contexto en el que el proceso electoral se encuentra protagonizado por la exclusión de la principal fuerza de la oposición.
El pasado mes de julio, el Consejo Supremo Electoral (CSE) ordenó la destitución de 28 diputados del opositor Partido Liberal Independiente (PLI) por desobedecer las órdenes de su nuevo líder, Pedro Reyes, al que muchos ven como un aliado en la sombra del Gobierno de Daniel Ortega.
Reyes accedió al liderazgo del PLI un mes antes, cuando la Corte Suprema falló a favor de dar el control del partido a sus antiguos líderes apenas tres días después de que la CNL ratificara a sus candidatos a las elecciones presidenciales.
Desde entonces, la oposición ha estado advirtiendo de la posibilidad de que se den "maniobras" y "promesas huecas" para que, en una suerte de "farsa electoral", Ortega consiga su objetivo de mantenerse cinco años más en el poder.
El diálogo entre la OEA y el líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) se conoció a algo menos de un mes de que se celebren las próximas elecciones, en las que Ortega se presenta junto a su esposa, Rosario Murillo Zambrana, como compañera de fórmula, después de que ésta fuera nombrada el pasado mes de agosto como candidata a la vicepresidencia.