ADÍS ABEBA, 21 Dic. (Reuters/EP) -
El Gobierno de Salva Kiir y los rebeldes de Riek Machar han acordado este jueves un alto el fuego para Sudán del Sur, después de cuatro años de guerra civil que han desatado una crisis humanitaria en la nación más joven del mundo.
El acuerdo, además de una tregua, permite expresamente el acceso incondicional de las organizaciones humanitarias a la población civil atrapada por los combates para llevar ayuda.
Este pacto ha sido posible gracias a las conversaciones de paz que han tenido lugar estos días en la capital etíope, Adís Abeba, bajo los auspicios de la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo de África Oriental (IGAD). Tanto Kiir como Machar han estado presentes en la firma.
El ministro de Información sursudanés, Michael Makuei Leuth, ha explicado ante los periodistas que "el cese de hostilidades será efectivo en 72 horas". "A partir de ahora, enviaremos mensajes a todos los mandos en el terreno para que se cumpla", ha prometido.
En este sentido, el Gobierno de Kiir ha subrayado que a partir de ahora "no habrá más combates", sino "sólo conversaciones", si bien el 2015 las partes ya firmaron un acuerdo similar que estalló un año después debido a una escalada de violencia en Yuba, que en apenas unos días dejó decenas de muertos y miles de nuevos desplazados.
El responsable de la Comisión de la Unión Africana, Musa Faki Mahamat, se ha mostrado optimista y confía en que el último acercamiento sea una "alentadora primera fase" para "terminar con la tragedia".
Por su parte, el ministro de Exteriores etiope, Workneh Gebeyehu, ha apuntado que "ya no hay excusas para seguir violando los Derechos Humanos", en la medida en que "todas las partes están obligadas a cumplir el acuerdo de alto el fuego" suscrito este jueves.
También han aplaudido el acuerdo Estados Unidos, Reino Unido y Noruega, que apoyaron el acuerdo de 2005 que dio pie al proceso independentista en Sudán del Sur. Los tres países felicitaron en un comunicado a las partes por su disposición para actuar "en beneficio de la población" y esperan que haya gestos "inmediatos" para seguir avanzando