MOSCÚ, 27 Jun. (Reuters/EP) -
El Gobierno ruso ha puesto en marcha este martes el envío de combustible utilizado por submarinos nucleares de la era soviética a una planta de reprocesamiento como parte de un esfuerzo internacional para limpiar una peligrosa herencia de la Guerra Fría.
El combustible radiactivo de más de 100 reactores de alrededor de 50 submarinos ha sido almacenado en Andreyeva Bay, una base naval en el noroeste de Rusia cerrada en 1992, en los últimos 35 años. Según el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo (BERD), que ayuda a financiar el proyecto, el combustible presentaba un serio riesgo medioambiental.
Desde Andreyeva Bay, el combustible será enviado al puerto ruso de Murmansk y luego a su destino final, la planta de reprocesamiento Mayak, en la ciudad rusa de Cheliábinsk.
El proyecto, establecido en 2003, complementa proyectos multilaterales y bilaterales rusos y está financiado por la Unión Europea, Canadá, Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Noruega y Reino Unido.
"Es un placer ver que los países ponen de lado sus diferencias para resolver un asunto tan importante como la herencia de la flota de propulsión nuclear en el norte de Rusia", ha asegurado en un comunicado el vicepresidente para política y asociaciones del EBRD, Pierre Heilbronn.
El proyecto tiene como objetivo eliminar los 22.000 conjuntos de combustible nuclear almacenados en Andreyeva Bay, algo que llevará varios años, según el BERD.