BELGRADO, 4 May. (DPA/EP) -
El Gobierno de Serbia ha suspendido este jueves la emisión de nuevas licencias de armas durante dos años y ha acordado inspecciones más estrictas a sus propietarios después de un tiroteo perpetrado por un estudiante en un colegio de Belgrado, que se ha saldado con al menos nueve muertos.
El Ministerio del Interior ha precisado en un comunicado, tras una reunión del gabinete serbio, que se llevarán a cabo en los próximos tres meses inspecciones sobre las armas para comprobar si su funcionamiento responde a las regulaciones correctas, según ha informado la agencia de noticias Beta.
El jefe de la Policía, Veselin Milic, explicó que el sospechoso del tiroteo, un menor de 13 años, llamó a las autoridades para avisar de la masacre en la Escuela Primaria Vladislav Ribnikar del barrio de Vracar, cerca de las 8.40 (hora local).
El menor llevaba un mes planeándolo e incluso dispuso en una lista quiénes serían sus objetivos. Al llegar al centro, disparó primero contra un guardia de seguridad, que perdió la vida, y posteriormente atacó a numerosos compañeros. Al menos ocho de ellos perdieron la vida.
El Gobierno confirmó en la víspera que el sospechoso iba a menudo junto a su padre a un campo de tiro, pero en su entorno no había levantado sospechas. Según sus compañeros de clase, había acudido el día anterior a una fiesta de cumpleaños, donde se había comportado con aparente normalidad.