MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
El mariscal de campo Jalifa Haftar, que encabeza el Ejército Nacional Libio apoyado por el Gobierno asentado en el este del país, ha pedido más tiempo hasta el martes por la mañana antes de firmar el acuerdo sobre el alto el fuego propuesto por Rusia y Turquía, según ha anunciado este lunes el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov.
Quien sí ha procedido a firmar el documento ha sido el primer ministro del Gobierno reconocido internacionalmente, Fayez Serraj, así como el presidente del Alto Consejo de Estado, Jalid al Mishri, ha precisado Lavrov.
El jefe de la diplomacia rusa ha aclarado que Haftar y Akila Salé, presidente del Parlamento que tiene su sede en Tobruk, en el este, "ven este documento de manera positiva" pero han pedido "tiempo adicional" hasta el martes por la mañana "para tomar una decisión sobre la firma", ha aclarado el ministro ruso.
Haftar inició el pasado mes de abril una ofensiva para hacerse con el control de Trípoli, donde tiene su sede el Gobierno libio. El general libio retomó desde el inicio del año con mayor contundencia sus acciones, provocando preocupación en la escena internacional y gestiones por parte de varios dirigentes, entre ellos los presidentes de Rusia y Turquía, Vladimir Putin y Recep Tayyip Erdogan, que llamaron el miércoles pasado a un alto el fuego en el país a partir de este domingo.
El mariscal de campo y Serraj han llegado este lunes a Moscú para participar en las consultas entre los ministros de Exteriores y de Defensa de Rusia y Turquía y los representantes de los bandos enfrentados en el conflicto en Libia con vistas a lograr un algo el fuego en el país norteafricano.
Según la agencia Sputnik, que ha tenido acceso al borrador del acuerdo, los participantes en la reunión de Moscú se comprometen a "garantizar, sin condiciones previas, el cumplimiento del cese de hostilidades, que entró en vigor el 12 de enero de 2020 a las 0.00".
Además, de acuerdo con el texto, ambas partes del conflicto deben "cesar las acciones militares y esforzarse por lograr la desescalada de las hostilidades en todos los ámbitos". En este sentido, está previsto "determinar una línea de contacto que garantice un alto el fuego sostenible, respaldado por la adopción de medidas necesarias para estabilizar la situación en el terreno y normalizar la vida en Trípoli y otras ciudades".