WASHINGTON, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Estados Unidos ha comenzado a devolver al Congreso copias de un amplio informe de 2014 que describe los programas de arresto e interrogatorio llevados a cabo en los años anteriores por la CIA, lo que en la práctica podría implicar que estos documentos nunca lleguen a ver la luz al quedar exentos de publicación futura.
El informe, de 6.700 páginas, fue elaborado por el Senado y recoge supuestamente algunas de las torturas llevadas a cabo por los servicios de Inteligencia en el marco de la 'guerra contra el terror' de George W. Bush. La principal conclusión de esta investigación es que los métodos de interrogatorio fueron más brutales y menos eficaces de lo que alegaron las autoridades.
La senadora demócrata Dianne Feinstein, que lideraba en 2014 la Comisión de Inteligencia del Senado, solicitó el reparto de copias del informe entre distintas agencias de la Administración, con el objetivo de que se pudiesen conocer todos los detalles --y no sólo un resumen ejecutivo-- gracias a la Ley por la Libertad de la Información.
Sin embargo, el actual presidente de la Comisión, Richard Burr, ha pedido a la Casa Blanca que localice y devuelva las copias enviadas, según fuentes citadas por el periódico 'The New York Times'. Al Senado ya han llegado algunos de estos ejemplares, que al pasar a formar parte de los registros del Congreso quedan fuera de posibles peticiones de divulgación pública.
En cualquier caso, al menos una copia del informe no volverá a la Comisión de Inteligencia de la Cámara Alta, la que quedará en el archivo del expresidente Barack Obama, según una carta remitida en diciembre de 2016 por Feinstein al entonces principal abogado de la Casa Blanca, W. Neil Eggleston, informa la agencia Reuters.